El presidente de la Mesa de Opinión Cívica y Política Cristiana, reverendo Domingo Paulino Moya, aseguró que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha perdido y agotado la confianza para que la oposición política de ese país asista a un diálogo, como proponen líderes políticos y organismos como la ONU.
Paulino Moya puso como ejemplo la táctica dilatoria que usó el heredero del fenecido presidente Hugo Chávez en el diálogo que se efectuó en Santo Domingo entre representantes del Gobierno y la oposición venezolana, en el cual “no respetó la mediación del presidente Danilo Medina y logró burlarse de la oposición política reunida en la Mesa de la Unidad Democrática del país sudamericano”.
Indicó que la fortaleza política ganada por el diputado Juan Guaidó, autoproclamado presidente provisional de Venezuela y al que un conjunto de naciones y organismos financieros han reconocido como el presidente legítimo, unido a la pérdida de aliados como la República Dominicana entre otros, obliga a Maduro a dar paso a una transición de poder inmediato para convocar elecciones con garantías justas y transparente.
Enfatizó que Maduro debe comprender de manera oportuna que ya no tiene espacio para la dilatoria en esta crisis y que se le agota el tiempo en el poder, por lo que debe comenzar a crear las condiciones de convocar a unas elecciones creíbles, con la supervisión de los organismos tutores del orden global.
Además, sugirió avanzar en común acuerdo con la oposición, a la restauración de los órganos electorales, “respetar la asamblea nacional, permitir la entrada de ayuda humanitaria, dar garantías de seguridad al presidente provisional Juan Guaidó y a los líderes políticos de la oposición y por último liberar a todo los presos políticos”.
Puntualizó que esta son las salidas políticas que aconseja el sentido común a Maduro, además de aceptar “la buena voluntad del presidente provisional” que le ofrece a él y su equipo de gobierno “una amnistía” que, a su juicio, debe aceptar.
