WASHINGTON (AP) — El principal asesor económico de la Casa Blanca, Gary Cohn, renunció a su cargo debido a sus discrepancias con el presidente Donald Trump en política comercial, la más reciente de una serie de salidas de miembros del personal de la presidencia.
Cohn, director del Consejo Económico Nacional, ha sido el principal oponente interno a los aranceles que Trump planea imponer al acero y al aluminio. Intentó orquestar una acción de último minuto para persuadir a Trump de revertir esa decisión. Sin embargo, Trump se ha resistido y el martes reiteró que impondrá los aranceles en los próximos días.
La salida de Cohn se da durante un periodo de alboroto sin precedentes en el gobierno de Trump, y algunos asesores se preocupan ante la idea de que más miembros de la Casa Blanca pronto se dirijan hacia las puertas.
El anuncio se dio horas después de que Trump negara que hubiera caos en la oficina presidencial. Trump aseguró que su Casa Blanca tenía “tremenda energía”, pero varios funcionarios del ejecutivo dijeron que Trump ha exhortado a sus asesores a que se queden.
“Todos quieren trabajar en la Casa Blanca”, dijo Trump durante una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro sueco Stefan Lofven. “Todos quieren una parte de la oficina oval”.
En un comunicado, Cohn afirmó que fue un honor para él servir al gobierno y “promulgar políticas a favor del crecimiento económico para beneficio del pueblo estadounidense”.
A pesar de las desavenencias, Trump elogió a Cohn y afirmó que “sirvió a su país con gran distinción”.
Cohn es un ex ejecutivo de Goldman Sachs, y se unió a la Casa Blanca luego de dejar la empresa de Wall Street con un incentivo de 285 millones de dólares. Tuvo una participación central en ayudar a que Trump promulgara una enorme revisión fiscal en coordinación con miembros del Congreso.
La salida de Cohn es un golpe para los republicanos del Capitolio y para las asociaciones comerciales que esperaban que Trump escuchara sus preocupaciones sobre los aranceles, y que Cohn fuera la fuerza moderadora mientras el gobierno renegocia el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
“Odio ver a Cohn partir”, dijo el líder de la mayoría del Senado Mitch McConnell a The Associated Press.
A Trump le encantaba presumir la riqueza del ex ejecutivo, pero el paso de Cohn por la Casa Blanca fue inestable. Cohn casi deja su puesto en el gobierno a mediados del año pasado luego de sentirse molesto por los comentarios del presidente sobre la violencia racial en Charlottesville, Virginia. Cohn, un judío, escribió una carta de renuncia pero nunca la envió.
Cohn le dijo a otro asistente de la Casa Blanca en semanas recientes que tenía pocos motivos para quedarse si Trump seguía adelante con su plan de aranceles, según un funcionario de la Casa Blanca familiarizado con sus puntos de vista. El funcionario habló bajo condición de anonimato.
La Casa Blanca no anunció por el momento quién tomará el lugar de Cohn, cuyo suplente, Jeremy Katz, se fue en enero. Entre los mencionados están el comentarista de CNBC Larry Kudlow y el director de la Oficina de Administración y Presupuesto Mick Mulvaney, según una persona familiarizada con las conversaciones.