Dajabón. Un día después de que haitianos derribaran la puerta fronteriza para permitir el paso de extranjeros y la reactivación de las actividades comerciales, cientos de negociantes de la vecina nación y de este país desarrollaron ayer con normalidad el acostumbrado mercado en la zona de Dajabón.
Las actividades, que estuvieron suspendidas desde hace más de tres meses, se reanudaron ayer, aunque no en su totalidad. Grandes cantidades de productos y mercancías han sido apostadas por parte de los dominicanos, mientras que los haitianos colocaron tejidos, calzados y electrodomésticos.
A los comerciantes se les permite el paso organizado con la vigilancia y el control del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront), hasta la terminal de Aduanas y Migración, donde realizan sus chequeos para cruzar al centro del mercado. Sin embargo, en el área establecida para el registro biométrico, la presencia de los extranjeros haitianos es nula.
Las operaciones se están realizando por la puerta establecida, cruzando por Migración y el departamento de almacenes de Aduanas, donde pagan impuestos. El Cesfront mantienen la organización en filas de los haitianos hasta entrar y salir del país, mientras que otra gran parte de los llamados viajeros, esperan en filas de este lado hasta que se les dé paso hacia su territorio.
Abinader llama a preguntar a Haití
Al ser abordado sobre el incidente, el presidente Luis Abinader instó a preguntar al gobierno de Haití sobre el derribo del portón fronterizo, tras asegurar que su tarea es resguardar la seguridad de la República Dominicana.
Ante una pregunta en su recorrido por Santiago sobre la situación de la frontera, el presidente Abinader se refirió brevemente el derribo del portón fronterizo. “¿De quién era esa puerta?, entonces deben preguntarle al gobierno de Haití de eso, nosotros lo que estamos es protegiendo la frontera”, dijo Abinader.
El incidente
Enardecidos haitianos arrancaron y lanzaron el pasado jueves al río Masacre la puerta que divide a Juana Méndez por el puente fronterizo con Dajabón, la cual minutos antes había sido abierta por un supuesto funcionario.
Todo ocurrió alrededor de las tres de la tarde, cuando se presentó al lugar un Jeep marca Toyota land Cruiser, del cual salió un hombre vestido con botas, pantalón negro y poloshirt blanco, que cruzó por el frente de los miembros de la Policía Nacional de Haití, Policía Fronteriza, un vigilante de Aduanas y los del servicio de Inteligencia y realizó la acción.
La situación fue aprovechada por miembros de la cámara de comercio y del sindicato de transportistas de carga, quienes se inmediato comenzaron a fluir hacia y desde ambos lados de la frontera.
Al lugar, se presentaron otros miembros de la policía haitiana, quienes al parecer en medio de la confusión, intentaron tomar el control del paso fronterizo, encontrándose con una multitud enardecida que lanzó una de las dos puertas de más de 20 metros de altura, hacia el río que divide la frontera entre ambos territorios.
