El director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa) ofreció detalles sobre los avances del proyecto de saneamiento en el Arroyo Gurabo, durante una entrevista especial en el programa Despierta con CDN.
Wellington Arnaud reveló que nunca antes en el país se había emprendido una obra de esta envergadura.
“Esto fue una iniciativa del presidente Luis Abinader que en sus múltiples visitas a Santiago, el actual senador de la provincia, Eduardo Estrella, le planteó la importancia de sanear el río Gurabo. Este tiene una particularidad que es que contamina el 43 por ciento del río Yaque del Norte. El presidente nos convoca a una reunión con don Eduardo y se nos da la responsabilidad de iniciar este proceso de saneamiento”, dijo.
El funcionario expresó que, actualmente, la iniciativa se encuentra en un 60 por ciento de avance y estimó que tendría un costo total de aproximadamente 2 mil millones de pesos.
Arnaud manifestó se espera que este proyecto sirva como modelo para futuras mejoras en sistemas de saneamiento en otras regiones del país.
Según el funcionario, uno de los desafíos más destacados del proyecto ha sido la reubicación de más de 6 mil familias en el área intervenida.
Las comunidades beneficiadas son La Javilla-Puchulo, Callejón de la Jagua, Las Cayenas, Zaida, Las Mercedes, Radiocentro, Los Ciruelos Abajo, La Terraza Abajo, Villa Esperanza, Hoyo de Puchula, Miraflores II, Los Santos Abajo, Los Solares y Hoyo de Bartola.
“Lo primero que realizamos fue un censo para determinar las personas que vivían alrededor de Arroyo Gurabo, hablamos de más de 6 mil familias. Estas familias se fueron clasificando por rango de vulnerabilidad y se determinó que había más de dos mil que están en mayor peligro porque cada vez que había una crecida, aquí había una catástrofe.
Arnaud resaltó que el diseño contempla crecidas de hasta 250 metros cúbicos en una proyección de 100 años.
“Y es buena la calidad de la obra, cuando tuvimos el tema de las lluvias, gracias a Dios y al trabajo de nuestros ingenieros, tengo que resaltar el extraordinario equipo técnico con el que nosotros contamos. El agua corrió sin ningún tipo de problema, porque precisamente el diseño del canal contempla una crecida de hasta 250 metros cúbicos en una proyección de 100 años”, expresó
El titular de Inapa manifestó que el proyecto no solo aborda la problemática ambiental, sino que también busca mejorar la conectividad de la región mediante la construcción de un puente que unirá sectores previamente aislados.
Explicó que serán reubicadas más de 1,200 familias en apartamentos en Altos del Yaque, eso está en marcha, con 600 familias ya trasladadas, destacando la coordinación efectiva con el ministro de Vivienda, Carlos Bonilla, y su equipo.
“Nos reunimos con los comunitarios y les explicamos que íbamos a hacer el saneamiento, que se iban a reubicar en principio 1,200 familias para ser llevadas a unos apartamentos en Altos del Yaque. Se han entregado 390 apartamentos totalmente nuevos y ya están viviendo allí más de 250 familias, que hoy día ya le cambió la vida”, detalló.
Dijo que el proyecto es de 5.5 kilómetros de longitud de saneamiento.
“Se está colocando a cada lado del arroyo una tubería de 16 pulgadas que está recogiendo todas las aguas residuales que antes vertían al río y cuyo destino final era el río Yaque del Norte. Llevamos casi un 20% de eliminación de la contaminación al día de hoy”, sostuvo.
Manejo medioambiental
La arquitecta María Isabel Serrano destacó la importancia de la participación de la comunidad para lograr que esto fuera sostenible. Expuso que en este proyecto la gente ha sido protagonista, y uno de los componentes de la sostenibilidad, es el social.
“O sea, si socialmente un proyecto no responde a esas necesidades, entonces, empezando por ahí no hay sostenibilidad. Se ha intentado desde que se originó el proyecto, no solamente en esta etapa, integrar gente de la comunidad”, resaltó.
Indicó que lo primero que se hizo fue restaurar el bosque ribereño que había sido degradado y contaminado.
Detalló que se buscó recuperar la capacidad de los suelos para permear el agua de lluvia y destacó el uso de bancos fabricados con plástico reciclado y madera tratada, lo cual contribuye a evitar daños ambientales y tiene una larga vida útil y que se utilizó paisajismo ecológico con especies endémicas.
Dijo que en el proceso inicial, se desvió del agua contaminada y se diseñaron áreas verdes.
Explica el proceso de saneamiento
José Aybar, director de supervisión y fiscalización de obras de Inapa, explicó que se realizaron estudios hidrológicos para determinar la capacidad del canal. Con una lluvia de probabilidad de ocurrencia de 100 años, se puede generar un caudal de 250 metros cúbicos por segundo. “El canal debe tener capacidad para conducir ese gran caudal y se definió una sesión desde el punto de vista ingenieril con una altura superior de 19 metros, inferior de 9 metros y una altura total de 3 metros”, refirió.
Resaltó el apoyo de instituciones como la Corporación de Acueductos y Alcantarillados de Santiago (Coraasan), Medio Ambiente, Santiago Solidario y el senador Eduardo Estrella. Sobre los desafíos que enfrentaron en el proceso, resaltó que la parte más complicada es el manejo de los comunitarios. “Inclusive al principio para poder hacer los estudios, el levantamiento topográfico y lo demás, había ciertas resistencias”, dijo. Sin embargo, indicó que mediante un proceso de socialización del proyecto se logró llegar a acuerdos favorables con los comunitarios.