Moca. La construcción de una nueva planta de tratamiento que ponga fin a los niveles de contaminación que afecta el río Moca está entre las demandas de los grupos populares convocantes a un paro de labores.
La paralización de las actividades económicas, de transporte y educativas en Moca y el municipio de Licey al Medio, estaban pautadas para los días 4 y 5 de este mes, pero los convocantes decidieron dar un compás de espera de 30 días.
Durante un encuentro realizado ayer y que fue encabezado por el gobernador provincial de Espaillat, Andrés Diloné Ovalles y el general José Acosta Castellanos con los voceros de los grupos populares convocantes, salieron a relucir entre las demandas la búsqueda de solución al cierre definitivo del vertedero. Diloné Ovalles se comprometió a canalizar parte de las demandas de los convocantes a la huelga, aunque sin que se plantearán soluciones concretas y en un determinado plazo.
Además, demandan la reconstrucción y asfaltado de calles en sectores como Maco Tibio, La Española y Viejo Puerto Rico. En estos sectores llevan años demandando también el traslado de familias afectadas por las inundaciones y deslizamientos de tierra. Juan Comprés, del Movimiento Los Peregrinos de Moca, también reclamó intervenir en las comunidades Cacique y Quebrada Honda, afectados por la caída de puentes y malas condiciones de sus vías.
Víctor Bretón, vocero del Frente Amplio de Lucha Popular (Falpo), dijo que para dar un compás de espera se hace necesario que el gobierno dé respuesta a las demandas. Bretón recordó que después de que se otorgan plazos y se dejan conformadas comisiones, el seguimiento a las demandas de las organizaciones sociales y populares se queda en punto muerto.
Al encuentro acudió, en representación de la iglesia católica, el sacerdote José Solís, así como representantes del sector comercial y empresarial de esa zona. Los representantes advirtieron que quieren soluciones.
