Santiago La Iglesia católica planteó la necesidad de que los sectores público y privado asuman el papel de brindarles oportunidades de trabajo a los jóvenes dominicanos para reducir criminalidad.
Entiende que en la medida en que los muchachos están ocupados en actividades productivas, irán desapareciendo tantos signos de muerte en la sociedad dominicana.
“La violencia y la inseguridad ciudadana que sufrimos, y que no es asunto de percepción, disminuirán considerablemente, porque hemos visto que en la mayoría de crímenes y atracos que ocurren en nuestro país, están involucrados jóvenes”, apunta el semanario Camino.
Dice que esa cotidianidad llena de vicios, trampas y engaños en que la sociedad actual ha llevado a un sector importante de la juventud dominicana, secuestra el presente y hace de ellos veletas que van hacia donde el viento de la destrucción los lleve. En ese sentido, lama a trabajar para ayudarles a cambiar los días grises por un mejor porvenir.