Santiago. La Iglesia Católica calificó las constantes huelgas médicas como la expresión más clara del desprecio hacia los más pobres.
Entiende que los pacientes que acuden a los hospitales al parecer no cuentan, pues son los excluidos. “Lastima el alma ver a decenas de madres de familia yendo a los hospitales en busca de la salud perdida y encontrarse con la indiferencia de quienes están llamados a devolverle la esperanza de vida a un ser querido”, apuntó a través del semanario Camino.
También llama a las autoridades del Ministerio de Salud a no escatimar esfuerzos para lograr un acuerdo satisfactorio con el Colegio Médico.
Refiere que Camino nunca estará al margen de los reclamos médicos, y menos cuando conocen de tantos funcionarios que cobran sueldos lujosos, algunos de ellos sin haber dedicado ningún tiempo ni esfuerzo en su formación académica. Dijo que si estos paros afectaran a los que tienen poder económico y político, hace tiempo se habría resuelto.