Santiago. En el hospital de niños Doctor Arturo Grullón tienen más de un año que no pueden hacer cirugías electivas o de urgencia por la falta de quirófanos y la contaminación del área.
Xenia Gell y Tuty Zouain, presidenta y fundadoras del Voluntariado Jesús con los Niños, respectivamente, atribuyeron la situación a la paralización de los trabajos de algunas áreas del centro de salud, por lo que demandaron sean agilizados y se instale el tomógrafo. Denunciaron que en la actualidad, el espacio utilizado para quirófano funciona entre la morgue y el aislamiento, causando que algunos pacientes resulten afectados por la contaminación. Gell y Zouain, quienes llevan un largo tiempo trabajando con niños con problemas de cáncer en un área habilitada en el hospital infantil, lamentaron que el tema de la salud no sea una prioridad ni para la actual administración del gobierno ni para los funcionarios de ese sector.
En precariedad
Dijeron que en la más reciente visita realizada por el presidente Danilo Medina, para verificar las condiciones de ese centro de salud, los trabajadores no han regresado y las labores permanecen paralizadas. “Las lámparas de cirugías fueron instaladas, pero tan bajitas que chocan con las camillas y dificulta que las operaciones puedan practicarse debido a que no cumplen con el protocolo”, refirieron. De siete quirófanos, seis están fuera de servicio y solo uno improvisado está habilitado y en condiciones críticas.
La remodelación de las áreas demandadas por el Voluntariado Jesús con los Niños se inició a mediados del 2015 y se desconoce cuándo será entregado. Zouain y Gell recuerdan que Francisco Pagán, de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), prometió el pasado año, en dos ocasiones, que serían terminados los trabajos, cosa que no ha cumplido.
Situación ha generado quejas y protestas
Una de las excusas para no entregar el área de cirugía, es que deberá hacerse junto a la instalación del tomógrafo. La lucha por el equipamiento además del voluntariado, es asumida por el pastor Pablo Ureña, del programa Niños con una Esperanza del sector Cienfuegos. Con varios métodos de protestas, Ureña ha denunciado que muchos niños han fallecido por la falta de equipos.