Santiago. La comunidad de Canca la Reina marchó en reclamo del cese de la ola de delincuencia que les afecta y en demanda de otras reivindicaciones sociales que por años han reclamado moradores de ese distrito municipal.
Los comunitarios señalan que desde hace años los diferentes sectores y comunidades de aquí han sufrido las consecuencias de los niveles de inseguridad y delincuencia, como robo a mano armada y la penetración a los hogares para sustraer los bienes de las personas que con tanto sacrificio han obtenido.
Dicen que los delincuentes utilizan todas las modalidades del crimen organizado para cometer el delito, pero que el Ministerio Público y la Policía Nacional han sido incapaces de dar respuesta a la demanda de poder transitar seguros.
El reclamo lo hicieron los voceros de las diferentes organizaciones sociales de ese distrito municipal, así como varias juntas de vecinos y otras organizaciones populares y comunitarias que hacen vida en esta productiva zona, entre las que se encuentran el Falpo, Flup, Falju, la Junta de Vecinos La Inmaculada Concepción, así como el Club UDECUNG, entre otras.
A esto se le suma que se carecen de todas las necesidades básicas para vivir con dignidad, las calles están completamente deterioradas y sin ningún tipo de condiciones para el tránsito, el tendido eléctrico no sirve, en muchos lugares éste se encuentra al nivel del suelo y encima de las alambradas, siendo esto un peligro para todos.
Mientras que el servicio de agua potable ofrecido por CORAAMOCA y CORAASAN es insuficiente para suplir las necesidades de los comunitarios del distrito. Este servicio solo llega dos veces a la semana, no más de una hora, y para poder almacenar el agua debe haber energía eléctrica o una planta para obtener el líquido. Otra demanda es la escuela Ramón Rodríguez que está en construcción, a la que le falta el veinte por ciento para ser terminada, encontrándose en completo abandono.