Santiago. El descenso estrepitoso del nivel de las presas que permite alimentar de agua potable a comunidades de Santiago y Moca entró en su punto más crítico.
Y es que el agotamiento el nivel del complejo de presa Tavera-Bao-López, descendió a 312.96 con una entrada a los embalses es de 10.16 y la salida de 13.0 metros cúbicos por segundo.
La gravedad de la crisis está generando una agudización de los servicios que ofrece la Corporación de Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) y la Coraamoca, que enfrentan un déficit entre ambos de más de 40 millones de galones por día.
La Coraasan está produciendo por día 104 millones de galones, es decir un 30 por ciento menos que la demanda de la población.
En comparación al día 14 de mayo del pasado año, es totalmente opuesto a la situación que enfrenta hoy, pues para esa fecha los embalses se encontraban 32.89 metros sobre el nivel del mar.
Saúl Abreu, de la Asociación para el Desarrollo Incorporada y de Pla Agua Yaque, advierte que si se mantiene la tendencia y no llueve a las zonas de recarga hídrica en los próximos días esta zona estará enfrentando serias limitaciones de abastecimiento de agua.
“El nivel de los embalse del complejo Tavera-Bao sigue bajando de manera alarmante. El lunes estaba en la cota 313.10 msnm (el jueves pasado estaba en la 313.15) y no bajó de las 313 este fin de semana porque no ya se está turbinando para la generación de energía eléctrica”, apunta. La proyección que se tiene es que baje de las 312.
Abreu llama a ahorrar agua y tomar conciencia de la necesidad urgente de restaurar los servicios ecos sistémicos de las cuencas hidrográficas.
Marino Abreu, director para la región Norte del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INDRHI), informó que en el caso del embalse de Monción su nivel es de 245.68 metros sobre el nivel del mar. La entrada apenas es 4.08 metros cúbicos por segundo y la salida de 7.0 metros cúbicos.