El comercio cerró sus puertas y el transporte se redujo de forma significativa
El paro que por 24 horas convocaron organizaciones populares en las 14 provincias de la región Norte fue acatado con el cierre del comercio, la suspensión de la docencia y el transporte.
En barriadas como Cienfuegos, turbas aprovecharon para saquear varios establecimientos comerciales, mientras en Licey al Medio derribaron postes del tendido eléctrico, dejando a varios sectores sin energía eléctrica.
En víspera del paro, un hombre identificado como Jairo Miguel Taveras, de 23 años de edad fue impactado por una bala en la pierna derecha cuando intentaba incendiar neumáticos en la calle 30 Caballeros. El general José Acosta Castellanos , director regional de la PN,informó que por los hechos hay cinco detenidos.
En tanto, que en Bonao resultó heridos, durante el paro, Miguel Virgilio Martínez de 28 años, así como otro hombre aún sin identificar.
En San Francisco de Macorís, provincia Duarte, el paro trascurrió con normalidad, aunque en los sectores de Pueblo Nuevo, Hermanas Mirabal, -San Martín, Ribera del Jaya, había neumáticos incendiados y desperdicios en la vía pública. Para mantener vigilada las barriadas, los organismos de inteligencia del Estado utilizaron un dron que le permitiría saber los pasos de los manifestantes.
La Coalición de Organizaciones del Cibao, que convocó a la jornada de protesta aseguró durante una asamblea evaluatoria, que el paro fue acatado por el 95 por ciento de la población, incluyendo el comercio. Las universidades también decidieron suspender la docencia ante la ausencia de estudiantes.
Los convocantes al paro demandan 11 puntos, entre estos servicio de agua potable para todos los pueblos y comunidades, fin de los apagones y rebaja de la tarifa eléctrica, desmantelar la mafia de los combustibles y rebaja de los precios del gas y demás carburantes, lo que incidirá en la rebaja de los precios de la canasta básica familiar.
Además, los convocantes reclaman apoyo financiero directo a los productores avícolas, porcicultores, ganaderos y pequeños agricultores juntamente con la distribución de tierras y apoyo técnico y financiero para estos sectores generadores de empleo.
Los manifestantes pide aplicar planes de seguridad ciudadana que incluyan empleos dignos, educación técnica para los jóvenes y programa de viviendas de bajo costo, aumento general de salarios para los empleados y los trabajadores de los sectores público y privado, eliminación de las ARS y la puesta en marcha de un nuevo sistema de seguridad social que incluya hospitales decentes y bien equipados.
Igualmente, piden programas especiales para madres solteras y jóvenes sin empleo, declaración de Loma Miranda parque nacional, juicio político contra el presidente Medina y todos los presuntos corruptos involucrados en la trama Odebrecht y la despenalización del aborto en las tres causales.
En el municipio cabecera de Santiago de los Caballeros, la mayoría de establecimientos cerraron sus puertas, con excepción de algunos ubicados en la calle Del Sol.
En barriadas como El Ciruelito, Camboya, La Ciénaga, Pastor en Bella Vista, los manifestantes quemaron neumáticos y lanzaron gran cantidad de escombros en medio de las vías.
Mientras que en los municipios de Licey al Medio y Navarrete, el paro fue acatado en su totalidad con esporádicos enfrentamientos entre manifestantes y policías. En Navarrete, desconocidos tirotearon la vivienda del señor Carlos Cabrera, por desconocidos.
Osvaldo Brito, uno de los voceros de la Coalición de Organizaciones del Cibao, destacó el respaldo recibido en municipios como San Francisco de Macorís, Salcedo, Bonao y Nagua, donde dijo que el paro fue acatado de forma contundente. En algunos pueblos fue reforzada la presencia policial y militar para prevenir disturbios.