Santiago. En la comunidad de Villa Verde en esta ciudad, un niño de un año y cuatro meses de nacido murió al ingerir un aceite quemado que encontró en el patio de su residencia.
Dylan Rosario Jiménez vivía junto a sus padres en la citada comunidad. De acuerdo con versiones, en un descuido de los familiares el niño salió al patio y encontró una botella con un aceite quemado que un primo le había sacado a una planta eléctrica. Vecinos dijeron no explicarse cómo tuvo fuerza para quitar la tapa del envase.
Mientras, en una comunidad de Moca, el niño Isaías de Jesús cayó encima de un inversor y al hacer contacto con los cables sufrió la descarga que le quitó la vida al instante.
El hecho sucedió en la comunidad de Guauci y ha causando consternación en los residentes. Por tratarse de una familia de muy escasos recursos, la madre tuvo que pedir ayuda para poder sepultar al bebé. En ambos casos, los familiares resaltaron que se trató de hechos accidentales.