Santiago. Las autoridades desarticularon una supuesta banda de contrabandistas de armas de fuego y drogas que operaba en la región Norte, a la que además le decomisaron dinero.
Durante el operativo conjunto, encabezado por integrantes del Ministerio Público de Santo Domingo y Santiago, y agentes policiales de la Dirección Nacional de Control de Drogas, fueron apresadas varias personas, se incautaron de una indeterminada cantidad de dinero e intervinieron la financiera Proline Credi, ubicada en la avenida Estrella Sadhalá, en el sector Cerro Alto. También ocuparon 14 pistolas, en su mayoría Glock, CPU de computadoras para determinar si contienen informaciones valiosas. Otras tres fueron incautadas en un operativo en horas de la tarde del jueves, donde participaron varios fiscales. La suma de dinero incautado se estima en más de tres millones de pesos y fue decomisada a los apresados.
Investigación
Hasta ayer en la tarde se habrían realizado 20 requisas y se detuvo a diez personas, aunque se espera que continúen los allanamientos y se detenga a otros posibles implicados. La estructura piramidal de la banda criminal la encabeza un hombre identificado como Juan Antonio Ottenwalder Olivares, supuesto cabecilla de tráfico y contrabando de armas de fuego. Como principal socio y brazo operativo figura Víctor Rainiel Pérez Peña, mientras que Carlos Francisco Rodríguez López y Deivys Santiago Báez Cruz, aparecen en la estructura como contrabandistas de armas y drogas.
El principal colaborador de Báez Cruz, según las autoridades, es Benito Virgilio Viñas Castillo, al que implican también en narcotráfico y armas de fuego. En el caso de Luis Carlos Rodríguez Pérez, Iván de Jesús Paulino de Jesús, fueron detenidos por su participación como supuestos traficantes de armas de fuego y haberles hallado dinero en efectivo.
Caso es manejado con hermetismo
Durante el proceso de investigación fueron detenidos Anderson de Jesús Morán Cruz, hermano de Deivys Santiago Báez Cruz, quien figura como colaborador, así como un ex digitador de la Dirección Cibao Central de la Policía. El caso es manejado con hermetismo por las autoridades locales, debido a que los operativos fueron comandados por un equipo de Santo Domingo.