Santiago. En la comunidad Las Charcas, para enterrar un muerto deben sacar otro, debido a la falta de espacio en su cementerio, mientras que en la escuela donde imparten docencia, la sobrepoblación estudiantil es de 50 alumnos por aula.
La denuncia fue externada durante una marcha organizada por los representantes de organizaciones comunitarias para exigir del Gobierno central una serie de demandas sociales que van desde terminación del liceo, reconstrucción de sus calles, agua potable hasta ampliar el camposanto.
José Kunhardt, presidente de la junta de vecinos Juan José Batista dijo que aunque apenas están a diez minutos de distancia del centro del casco urbano del municipio de Santiago de los Caballeros, en Las Charcas tienen veinte años sin que los gobiernos salientes y de turno realicen una sola obra de importancia.
“El liceo imparte clases a trece comunidades cercanas y estamos en una situación muy difícil. Tenemos aulas con cincuenta estudiantes en una escuelita que se está usando como liceo. Tenemos ocho años con un centro escolar paralizado y cada vez que hacemos una protesta mandan dos personas a trabajar y nada pasa”, apunta el dirigente comunitario.
También reclaman que la empresa Edenorte Dominicana restablezca el servicio de 24 horas.
José Kunhardt dijo que el servicio de agua potable en esa demarcación es un desastre.
Luis Domingo Díaz, de la comunidad Los Ranchos perteneciente al municipio de Sabana Iglesia lamenta que el gobierno central no se deje sentir con la concreción de las obras que demandan los ciudadanos.
Los comunitarios mediante pancartas y consignas criticaron que los funcionarios se hagan los ciegos y sordos para escuchar el clamor de la población.
Pura Fabián, recordó que como comunidad han acudido a todas las instancias para reclamar las obras que requiere Las Charcas. La caminata recorrió más de dos kilómetros y concluyó frente a la escuela en construcción.