Sosúa. El aumento de la prostitución y la falta de controles por parte de las autoridades competentes preocupan a diversos sectores del municipio Sosúa, de la provincia Puerto Plata.
La preocupación nace de algunas madres, las que se quejan amargamente de la gran cantidad de trabajadoras sexuales en playas y calles del casco urbano de este municipio. Los niños que acuden a las escuelas tienen que ver a diario a decenas de mujeres y hombres ejerciendo su trabajo de ofertar sus cuerpos a extranjeros y dominicanos a plena luz del día.
La alcaldesa de Sosúa, Ilana Neumann, reconoce el malestar que genera la prostitución y valora la idea de que la comunidad se identifique con el real problema. Dijo que justo en estos momentos, trabajan un plan que permitirá ayudar a disminuirlo de manera gradual en un plazo no tan largo. “De alguna manera hemos tenido el apoyo de la Procuraduría, pero no ha sido fácil en el tiempo. Estamos más cerca ahora”, apunta Neumann.
La familia
Las madres que muestran su preocupación, entienden que esto afecta el buen desenvolvimiento de la sana convivencia natural de las familias sosuenses. “En el Batey Sosúa existen dos centros educativos, el colegio Luis Hess y la escuela pública y este es el ejemplo que le damos a nuestros hijos, de ser chulos y cueros”, dijo Altagracia Domínguez madre de tres estudiantes de primaria.
Luisa Martínez hace un llamado a no entregar a la corrupción los valores del pueblo. “No vamos a abandonar nuestras escuelas y colegios, que se muden ellos, que nosotros estamos aquí primero”, agrega Martínez. Una gran parte de los moradores del municipio de Sosúa consideran que todos estos males funcionan con la complicidad de algunas autoridades y el sector privado que se benefician directamente.
Piden a las autoridades controlar situación
Ante el avance de “la actividad de venta de turismo sexual”, incluyendo hoteles y policías, sectores piden frenar este tipo de actuación. Es por eso que hacen un llamado a la Procuraduría General de la República, Fiscalía de Sosúa, Ministerio de Salud, Medio Ambiente, Turismo, y demás autoridades competentes a buscarle una salida para controlar el turismo sexual.