Santiago. La Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santiago (Coraasan) presentó a los diferentes sectores de provincia el Programa de Integración Agua-Saneamiento Urbano-Rural, cuya inversión sería de 125 millones de dólares.
Se trata de un proyecto a implementarse a corto, mediano y largo plazo que busca mejorar la calidad de vida y las condiciones sanitarias de la población, así como las condiciones ambientales y reducir la vulnerabilidad al cambio climático en dicha provincia, a través del incremento del acceso y sostenibilidad de los servicios de agua y saneamiento.
Las presentaciones se realizaron vía consultas públicas, donde la entidad ejecutora y las partes interesadas se informaron sobre la naturaleza del proyecto, sus impactos y riesgos, positivos y negativos, las principales medidas de mitigación previstas, el mecanismo para atender a quejas y reclamos, y recopilar las observaciones y preguntas, así como brindar la oportunidad a los interesados en proponer medidas para mejorar o adaptar el proyecto.
Dentro del proyecto previsto con el programa a financiar, a través del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), se encuentra la construcción del colector 10 en Santiago, que consiste en la construcción de 8.65 kilómetros de colector en tubería de 1.5 metros en concreto.
Las aguas residuales recogidas por el colector serán dispuestas en la actual Planta de Tratamiento de Aguas Residuales de Rafey. También serán optimizadas las plantas de Rafey y Tamboril para aumentar su capacidad de recibimiento y tratamiento de las aguas residuales.
En lo que respecta al sistema de agua potable, la empresa acuífera contempla la intervención para optimizar las plantas de Nibaje y La Noriega. Para esto las inversiones se realizarán en los sistemas de floculación y decantación, filtración y dosificación de productos químicos. Dentro de este marco de proyectos se incluye también la construcción de nuevas redes de agua en polietileno de alta densidad y hierro dúctil, por un total aproximado de 122 kilómetros.