Santiago. El año escolar inició con el reclamo de terminación de varias escuelas en proceso de reparación o construcción y demanda de nombramiento de empleados.
En la escuela Jacinto de la Concha del sector Francisco del Rosario Sánchez, ubicada al norte de Santiago, algunos comunitarios se encadenaron en la puerta de entrada para demandar el nombramiento de empleados. Camilo Aracena dijo que hasta tanto sean asignados los 40 puestos de trabajo a personas de la comunidad, estarán en pie de lucha.
En tanto que en el sector San José y La Mina, al sur de Santiago, el bloque de junta de vecinos demanda terminar la escuela Padre Vidal en el sector la Villa Olímpica. Además reclaman que sea construido un albergue infantil. “Tenemos más de dos años reclamando que se termine la escuela Padre Vidal para que los niños de la Mina. En la actualidad, los niños deben trasladarse a comunidades muy lejanas y exponiéndose al peligro de ser atropellado”, expresa José Francisco Consuegra de la junta de vecinos.
En el caso de los 280 estudiantes de la escuela experimental Emilio Prud’Homme, en pleno casco urbano en el sector Los Pepines, las condiciones del techo obliga a que por segundo año tenga que ser trasladados a otros centros. Los maestros han recurrido hasta a vestirse de negro en señal de luto para llamar la atención de las autoriades, sin que logren su cometido de contar con una escuela decente.
También los estudiantes de las escuelas Ulises Francisco Espaillat (UFE), y la Emma Balaguer, la primera en centro de Santiago y la segunda en la parte oeste, que se encuentran en altos niveles de deterioro y que empezarán la docencia en las aulas que están servibles.
En el caso del UFE algunas aulas se encuentran en proceso de reparación desde hace un largo tiempo. Mientras, de acuerdo a la Asociación Dominicana de Profesores considera que no existen condiciones para iniciar el año escolar, debido a que muchas escuelas están sobrepobladas.