JERUSALÉN— Líderes cristianos anunciaron el martes que reabrirán la iglesia del Santo Sepulcro en Jerusalén después de que las autoridades israelíes suspendieron un plan de cobrar impuestos sobre las propiedades de las iglesias cristianas en la ciudad santa.
“La municipalidad de Jerusalén está suspendiendo las actividades de recaudación que inició en las últimas semanas”, añadió.
El comunicado de las principales iglesias decía que estas “buscan comprometerse” con el equipo para asegurar que Jerusalén “siga siendo un lugar donde tres fes monoteístas pueden vivir y prosperar juntas”.
El alcalde Barkat había dicho que los impuestos solo afectan a las “propiedades comerciales”, como hoteles y oficinas, y no a los centros de oración. Afirmó que la medida es congruente con prácticas habituales en todo el mundo.
“Como alcalde de la ciudad de Jerusalén, mi objetivo y función es asegurar que la gente pague sus impuestos”, dijo. “No tenemos intenciones negativas o malas. Presentar esto como si tuviéramos algo en contra de las iglesias es totalmente injusto”.
Las iglesias dicen que todas sus propiedades se usan con fines eclesiásticos en beneficio de los peregrinos y las feligresías locales.
Acusaron a Barkat de violar un estatus quo vigente desde hace muchos años y actuar de manera deshonesta al no darles aviso de sus planes. Los líderes religiosos dicen que se enteraron del nuevo plan impositivo a través de la prensa.
Barkat rechazó la acusación y dijo que las iglesias han evadido sus impuestos durante años. Estima sus deudas en unos 185 millones de dólares.
Horas antes de retractarse, el alcalde exhortó a los jerarcas a abrir las puertas del Santo Sepulcro y entablar una demanda en los tribunales israelíes.