Otra variante a parte de los útiles es que se compense con un salario adicional a las familias para hacer frente al gasto del inicio del año escolar.
Santo Domingo.-El Observatorio Nacional Para la Protección del Consumidor-ONPECO- propone que en el mes de agosto sea liberado del pago de los impuestos todos los útiles escolares, como una forma de aligerar la carga de las familias que durante ese mes deben hacer grandes esfuerzos para preparar a sus hijos para el año escolar.
Las familias deben endeudarse para hacerle frente a los gastos en uniformes, zapatos, mochilas, libros y demás útiles para que sus hijos puedan entrar a las escuelas y colegios.
En agosto también se debe pagar por adelantado el mes de julio del siguiente año y cargar con la nueva tarifa de los colegios privados, la cual es regularmente incrementada sin que ocurra igual con los ingresos de las familias.
Igualmente, el ONPECO entiende que deben respetarse las disposiciones de la ley 66-97 que regula la educación, en el sentido de que los textos escolares deben revisarse cada cuatro años.
El artículo 78 de la referida ley establece que: “los textos básicos o complementarios u obras de consultas, a que se refiere el literal e) del presente artículo, una vez aprobados permanecen vigentes por un período no menor de cuatro años”
Sin embargo, varios libros de textos han sido cambiados pese a tener solo un año de vigencia, según denuncias de algunos padres a través de las redes sociales.
El ONPECO alega como ejemplo, que en Estados Unidos durante una semana de agosto los útiles son liberados del pago de impuestos, como una contribución a las familias de ingresos fijos.
Pero frente a las condiciones reales de nuestro país, en el mes de agosto debiera liberarse del pago de impuestos los útiles escolares o entregarle un salario adicional a uno de los padres para aligerar la carga, a la que se le suma también el alza de la factura eléctrica, la cual se ha duplicado en muchos hogares bajo el alegato de las altas temperaturas que se registran en este mes, lo que implica un gasto muy alto para las familias.
La temperatura, la presión y el estrés del inicio del año escolar implican una verdadera tortura para las familias, principalmente la de ingresos fijos.