El presidente Luis Abinader y la vicepresidenta Raquel Peña, junto a otros altos funcionarios firmaron el Compromiso por el Gobierno Ético el 22 de agosto, una acción similar a la asumida por el entonces presidente Danilo Medina y la vicepresidenta Margarita Cedeño el 22 de agosto de 2012.
El documento firmado por los funcionarios del actual gobierno se denomina “Compromiso ético de los altos funcionarios con la sociedad dominicana y el presidente Luis Abinader”.
En el transcurso de la pasada semana algunos funcionarios publicaron el momento de la firma de dicho documento en la Dirección Ética e Integridad Gubernamental que dirige Milagros Ortiz Bosch. El comunicado contiene diez puntos.
En tanto, la acción similar del pasado gobierno de Medina los funcionarios, lo firmaron bajo la denominación “Código de Pautas Éticas” también bajo la responsabilidad de la Dirección de Ética que para entonces encabezaba el fallecido dirigente del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), José Joaquín Bidó Medina. El documento contiene 18 puntos.
Al igual que los funcionarios del presente gobierno, en la gestión de Medina los funcionarios se comprometieron a evitar la “participación personal de los servicios públicos bajo mi responsabilidad en los asuntos donde puedan existir conflictos de intereses suyos o de sus familiares hasta el cuarto grado de consanguinidad”. Durante el gobierno de Medina también se promovió la creación de veeduría de las instituciones públicas con el fin de garantizar la transparencia en el uso de los recursos públicos.
En el punto 16 del documento firmado durante la primera gestión de Medina se establece que se actuaría con eficacia a fin de evitar “situaciones donde exista sospecha de ilegalidad o donde haya indicios de abusos de poder o resulte la situación carente de transparencia que debería acompañar todo acto del Gobierno, reconociendo el deber de denunciar ante la autoridad competente en caso de que ocurra uno de los supuestos”.
El compromiso ético asumido por el actual gobierno tiene algunas similitudes con los enunciados del documento firmado en la gestión de Medina en 2012.
Por ejemplo, el numeral ocho del comunicado del Gobierno establece: “Cumpliendo con los principios del buen gobierno, y la buena administración, dispuestos siempre a colocar el interés general por encima de los intereses partidarios, grupales y familiares, así como evitar incurrir en conflictos por causa de estos”.
El punto cinco del compromiso asumido por la actual administración afirma, al igual que lo hizo la anterior gestión, que ante posibles actos de corrupción procederá la denuncia ante las autoridades competentes.
“Evitar los actos de corrupción…evitando que el incumplimiento de las normas de administración pública, sea desconocida otorgando la debida protección al denunciante y al testigo que nos advierte o denuncien actos contrarios a los principios que rigen este compromiso ético”, apunta la publicación.
Igualmente, se comprometen a proteger los intereses del Estado “ejecutando correctamente el presupuesto asignado de manera eficiente y eficaz, mediante el logro de los objetivos perseguidos y no incurrir en conflictos de intereses”.
El compromiso ético abarca diez puntos entre los que resalta el cumplimiento a la Ley de Acceso a la Información Pública “de cuyo cumplimiento asumimos de manera directa desde el primer trimestre de este 2024”.
Abinader ha basado sus gobiernos en la ética
Según el documento publicado ayer en espacio pagado, los funcionarios hicieron el compromiso desde la primera reunión del Consejo de Gobierno. “Antes de entregar este compromiso ético permítanos enviar nuestro reconocimiento y gratitud a quienes con su voto hicieron posible que mayorías y minorías desde el territorio o desde otras naciones, dominicanos y dominicanas, que siguen con fe el destino de la patria hicieron posible la aprobación de una nueva gestión de gobierno al ciudadano presidente Luis Abinader”, expone el documento. Los funcionarios firmantes también expresaron gratitud a “quienes acompañaron al presidente en el difícil periodo de pandemia, de carestía y lucha por la salud actuando con transparencia, integridad y cumplimiento normativo y prevención. El presidente Abinader ha basado su propuesta de transparencia y ética en la administración pública en la independencia de algunos órganos como la Cámara de Cuentas y la Procuraduría General de la República. A mediados de la pasada gestión, la Contraloría publicó las irregularidades de algunas instituciones en los procesos de contratación lo cual fue calificado como de “faltas no graves y subsanables” por la Dirección de Ética.