En una evaluación de las elecciones generales presidenciales y congresuales del pasado domingo 19 de mayo, los analistas políticos José Gregorio Cabrera, Felipe Vallejo y Jatzel Román ofrecieron sus perspectivas sobre el impacto de la campaña y sus resultados.
Durante una entrevista en el programa Despierta con CDN, José Gregorio Cabrera destacó la singularidad de la campaña de Omar Fernández, que se caracterizó por su enfoque juvenil y alegre, centrado en sentimientos positivos de esperanza y alegría. A pesar del enorme apoyo y presión hacia el candidato oficialista Guillermo Moreno, Fernández logró imponer una narrativa de “David contra Goliat”.
“Todos vimos el nivel de presión y de apoyo para el candidato oficialista, digamos que sobrepasó cualquier expectativa y cualquier otro gesto que se hiciera con otros candidatos del mismo partido. Eso, digamos, que nos impuso una narrativa de David versus Goliat, en la cual nosotros éramos evidentemente David, una campaña dirigida por gente joven, mayoritariamente por voluntarios. El 95% del personal que trabajó y que trabaja en la campaña de Omar Fernández son jóvenes voluntarios, versus un aparato gubernamental”, dijo Cabrera.
Destacó que la campaña, que adoptó el eslogan “sí se puede” a mitad del proceso, resonó fuertemente entre los votantes y permitió a Fernández superar las proyecciones iniciales por cinco puntos adicionales, gracias a la movilización de votantes silentes y a un uso estratégico de encuestas sectoriales.
Desde el punto de vista del estratega en comunicación y análisis político Felipe Vallejo, el día de las elecciones, la información no confirmada en grupos de WhatsApp indicaba una ventaja fluctuante entre los candidatos. Imágenes previas al primer boletín mostraban a Guillermo Moreno confiado en una victoria. Sin embargo, el primer boletín oficial reveló la ventaja de Fernández, dato que sorprendió al PRM.
Vallejo subrayó que este resultado evidenció la fragmentación del voto en el Distrito Nacional, donde los votantes optaron por candidatos que mejor los representaban individualmente, en lugar de seguir líneas partidistas estrictas.
“Este comportamiento electoral resalta la necesidad de equilibrio democrático y la capacidad de los votantes de fragmentar su voto conscientemente”, expresó.
Vallejo señaló que la abstención en las elecciones municipales es una tendencia prácticamente normal. Sin embargo, indicó que la abstención podría estar inflada debido a inconsistencias en el padrón electoral, lo que sugiere que no todos los registrados son votantes activos. “La abstención podría estar siendo inflada en función del padrón, ya que no todos los registrados en él son votantes activos”, explicó Vallejo.
Según el experto, aunque el presidente Luis Abinader ha sido percibido positivamente con buenas intenciones y una gestión aceptable, la oferta electoral en general no logró captar completamente el interés de los votantes.
“A pesar de que el presidente Abinader tiene buenas intenciones y una gestión considerada aceptable, la oferta electoral no logró motivar plenamente a los ciudadanos”, comentó Vallejo.
En ese sentido, Jatzel Román señaló que el país es el más reeleccionista de América Latina. Sin embargo, precisó que las recientes reformas electorales han sido cruciales para permitir una mayor autonomía del votante.
Al comparar con las elecciones de 2006, Román destacó que anteriormente el voto por diputados influía directamente en el resultado de los senadores, una dinámica que ha cambiado con las nuevas reformas.
Ilusicón de polarización en la campaña política
El analista político Jatzel Román recordó que en 2016, los dos principales partidos de oposición, el Partido Revolucionario Moderno (PRM) y el Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), presentaron un único candidato, Luis Abinader, quien logró el 35% de los votos frente al 61% de Danilo Medina.
“Este apoyo unificado creó una ilusión de polarización que generó mayor entusiasmo entre los votantes opositores. Cuando tienes un 35% promoviendo a un mismo candidato, eso genera una ilusión de polarización que genera más efervescencia entre esos votantes opositores”, explicó Román.