El sistema de partidos políticos volvió al tripartidismo en 2020 con el nacimiento del partido Fuerza del Pueblo (FP), luego de 16 años de un bipartidismo que se consolidó a partir de los comicios de 2004.
En esa competencia por dominar al electorado, las elecciones de 2024, tanto municipales como la presidencial y congresual, definirán la reconfiguración de los partidos políticos que comenzó a partir de la división del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), el nacimiento de la FP y el fortalecimiento del Partido Revolucionario Moderno (PRM) tras su llegada al poder en las pasadas elecciones.
Serán los votos que logre cada organización los que definirán si la FP es el segundo partido, como proyectan las encuestas, cuánto ha caído el PLD comparado con el 37% que logró en 2020 y si el PRM ha crecido tanto como se percibe por la gran cantidad de partidos aliados que ha sumado y la captación de dirigentes del partido morado.
Concluidas las elecciones de 2020, el PLD ha sufrido una salida constante de dirigentes, además de que dos partidos han nacido de sus filas, la FP y Justicia Social, este último de nuevo reconocimiento y liderado por el exsenador, Julio César Valentín.
Las renuncias de los dirigentes del partido morado han servido para fortalecer a la FP y al PRM. Sin embargo, el partido morado, que el 15 de este mes cumplirá medio siglo de vida, es la marca partidaria de mayor arraigo social en el país por sus gestiones de gobierno de 20 años.
El presidente y líder del PLD y uno de los políticos más veteranos del país, Danilo Medina, recientemente advirtió que las próximas votaciones son de sobrevivencia para algunos partidos.
De hecho, el PLD y la FP que se alimentan del mismo segmento de votantes, participarán en alianza en las elecciones de febrero y las congresuales de mayo y con compromiso de respaldo para segunda vuelta, en una estrategia electoral en la que al mismo tiempo son competencia.
Si en las elecciones se cumplen las perspectivas de las encuestas, de que la competencia fundamental será entre el PRM y la FP, entonces la batalla electoral se centrará entre las dos organizaciones más jóvenes del sistema de partidos políticos del país.
La reconfiguración del sistema de partido que podría coronarse en las elecciones de 2024, arrancó con la caída del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y el nacimiento del PRM en 2014.
Para las elecciones de 2016, el hoy partido de gobierno se catapultó como la segunda fuerza electoral del país y ahora es el principal partido del país.
Además del PLD, el PRD y el PRSC, en sus tiempos de gloria electoral, solo el PRM y la FP han logrado consolidarse como partidos con una votación superior al 5% y con evidente perspectiva de crecimiento electoral. Esa realidad a pesar de que hay 34 partidos políticos, además de los 27 que participaron en 2020, hay siete de nuevo reconocimiento.
Según las encuestas, el número de personas que se identifican sin militancia política también va en crecimiento en el país. Otra variable a considerar, es que en las elecciones de 2020, no fue a las urnas más de un millón de votantes que históricamente acude a votar.
Habría que observar si esos ciudadanos vuelven a votar en las elecciones de 2024 y hacia cuál partido de los tres princiaples se inclinarán.
Según las encuestas mejor acreditadas en el electorado, para las elecciones de 2024 hay una alta expectativa de participación lo que proyecto que podría retornar al 70% histórico.
Entre el bipartidismo y el tripartidismo político
La historia de los partidos políticos en el país ha transitado entre el bipartidismo y el tripartidismo. El multipartidismo adquirió mayor relevancia luego del establecimiento del sistema de segunda vuelta desde las elecciones de 1996. Tras la caída de la dictadura de Rafael Leonidas Trujillo y la llegada del PRD al país en julio de 1961 y luego con la fudación del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) en 1965, el sistema de partidos se fundamentó en el bispartidismo y esas organizaciones se repartían el escenario electoral. El tripartidismo se inició en 1978, cuando el PLD, que fue fundado en 1973, logró un 9% de los votos. El tripartidismo siguió fortaleciéndose en la medida que el PLD siguió creciendo, pero el escenario se mantuvo polarizado entre el PRD y el PRSC. El tripartidismo se fortaleció más a partir de 1990. En esas elecciones, el PRSC obtuvo 35%; el PRD, 23% y el PLD, 33%. Para las elecciones de 1996, cuando se estableció el sistema de doble vuelta, el tripartidismo jugó su mayor efecto electoral al lograr una alianza de dos de tres fuerzas para la segunda vuelta. El modelo se mantuvo hasta 2000. Para las elecciones de 2004 regresó el bipartidismo con el empuje del PLD y la caída el PRSC, y se mantuvo hasta el 2020.