Villa González. Las demandas de ampliación del hospital municipal Napier Díaz y el traslado y construcción de viviendas para familias que ocupan la ribera del río Arenquillo, siguen sin ser escuchadas por parte del gobierno.
Desde hace un largo tiempo, los diferentes sectores sociales y político de este municipio, consideran urgente la necesidad de que el centro hospitalario sea acondicionado y ampliado.
Aunque cuentan con un solar amplio en el mismo espacio donde se encuentra el hospital, solo reciben promesas de las autoridades del Ministerio de Salud Pública. “Aquí hay terreno suficiente para para que sigan ampliando o que le construyan otro nivel, pero parece que nosotros no existimos para el gobierno”, expresa Ramona Núñez, residente en ese poblado.
El pasado día dos de octubre, los sectores representativos de Villa González paralizaron sus labores para demandar que el hospital sea intervenido, debido a las condiciones de deterioro. También esperan sea terminada la construcción el parque municipal.
Aunque para mejorar la imagen de su estructura, las autoridades sanitarias pintaron la edificación.
La otra demanda que por años vienen haciendo los comunitarios, es que se trabaje en un plan de desalojo de las familias que ocupan la ribera del río Arrenquillo.
En total cien familias quedaron afectadas con las lluvias en el año 2011 y aunque el gobierno construyó un proyecto habitacional que fue inaugurado en el 2013, la mayoría de los afectados quedaron fuera de la repartición de los apartamentos, según denuncian las familias.
Dicen que los políticos repartieron a particulares y allegados, las casas que fueron levantadas a la entrada del municipio, en la autopista Joaquín Balaguer.
Con los años, las familias que no fueron beneficiadas con los apartamentos optaron por retornar al peligro que representan las crecidas he dicho afluente, cuando se producen inundaciones en esa zona.