La vicepresidenta Margarita Cedeño sostuvo que se hace urgente la implementación en el país del Centro de Atención Integral a la Mujer como forma de enfrentar el alto número de feminicidios, que en lo que va de año ha alcanzado a 62 mujeres, según cifras oficiales, más cinco casos registrados la semana pasada.
Aseguró que la problemática que afecta a los hogares y deja en la orfandad a cientos de niños y niñas cada año debe abordarse de forma integral desde un centro de este tipo donde se ofrezcan todas las atenciones, ya que las iniciativas individuales de la Procuraduría General de la República y del Ministerio de la Mujer no están dando el resultado esperado.
“Este proyecto representa una atención integral desde la familia, desde esa problemática cultural, socioeconómica y psicológica que presentan las relaciones hombre-mujer, y esa situación de dependencia de la mujer también la podemos trabajar desde la independencia económica. Este es un abordaje muy integral, que espero en el Señor podamos aplicar a partir del próximo año y en el próximo cuatrienio”, indicó.
La Vicemandataria consideró que resultan insuficientes las acciones que se han ejecutado en ese sentido para eliminar el flagelo, al entender que, aunque las muertes han disminuido con relación al año pasado, la meta debe ser que no se pierda la vida de una sola dama por causa de la violencia machista.
Organizaciones sociales han convocado a participar en la “Marcha de las Mariposas” por la vida de las mujeres que tendrá lugar el próximo 24 de noviembre partiendo de la avenida Mirador Sur esquina Enrique Jiménez Moya, y culminará en el Centro de los Héroes.
Señalaron que el feminicidio es la expresión más extrema y visible de la violencia estructural hacia las mujeres, “esa violencia estructural se expresa en grandes desigualdades sociales que afectan negativamente a las mujeres, entre ellas, la pobreza, la inequidad salarial, la segmentación laboral, la mortalidad materna, los embarazos de adolescentes y el matrimonio infantil”.
Las convocantes advirtieron que sólo con el compromiso de la clase política se puede transformar esta realidad y garantizar mejores condiciones de vida y desarrollo para las niñas y mujeres en el país.