La Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) depositó este viernes una ofrenda floral en el busto del periodista Orlando Martínez, para conmemorar el 44 aniversario de su asesinato, perpetrado por fuerzas represivas del gobierno de los 12 años del doctor Joaquín Balaguer.
La ofrenda fue encabezada por la rectora de la UASD, Emma Polanco Melo, junto a otras autoridades académicas, familiares y amigos del malogrado periodista.
“Nuestra academia considera que es un deber recordar a las nuevas y futuras generaciones que Orlando Martínez fue un periodista emblemático que abrazó su profesión como un sacerdocio y la lucha de los más pobres… en una época en que estos sectores sociales eran víctimas de atropellos e injusticias y defenderlos era una acción heroica”, destacó Polanco Melo.
La máxima autoridad uasdiana agregó qué Orlando Martínez también fue un periodista honesto, sensato e inteligente, además de veraz y solidario que no especulaba ni teorizaba para ocultar la realidad, sino que la informaba de manera clara y objetiva.
En el homenaje al asesinado comunicador también estuvieron presentes los vicerrectores Alejandro Ozuna, Docente; Pablo Valdez, Administrativo; Mauro Canario Lorenzo Investigación y Postgrado, y Antonio Medina, de Extensión.
Asimismo, Bélgica Martínez Howley, hermana del occiso, Adriano de la Cruz, presidente del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), Narciso Isa Conde, representante del Comité Permanente de Homenaje a Orlando Martínez, así como dirigentes estudiantiles y miembros de la prensa.
La hermana de Orlando Martínez, en representación de la familia, agradeció a la gestión de Polanco Melo por mantener viva la memoria histórica y el legado dejado por la carrera intachable del periodista que murió defendiendo los más nobles ideales.
De su lado Isa Conde y el presidente del CDP coincidieron la necesidad de reforzar los valores éticos y morales de la sociedad para honrar la memoria de hombres como Orlando Martínez.
El acto tuvo lugar en efigie erigida en honor del malogrado periodista, justamente donde fue abatido, ubicada en la avenida José Contreras.