El presidente del Tribunal Constitucional (TC), Milton Ray Guevara, recibió formalmente las llaves del edificio donde funciona la Alta Corte, de parte del mayor general(r) Radhamés Zorrilla Ozuna, director ejecutivo del Instituto Nacional de Estabilización de Precios (Inespre), entidad con la que compartía la sede hasta el momento.
Con esta entrega se da por finalizado el proceso de traslado de las oficinas del Inespre a su nueva ubicación en el edificio del Instituto Agrario Dominicano (IAD) en la avenida 27 de Febrero y la cesión completa del edificio al TC.
El traspaso, ordenado por el presidente Danilo Medina en el 2016, proveerá al tribunal del espacio necesario para el oportuno desarrollo de su gestión.
En el acto, el mayor general Zorrilla Ozuna expresó su agradecimiento al magistrado Ray Guevara por la generosidad y paciencia que tuvo con la institución que dirige durante el proceso de mudanza y reiteró su disposición de mantener los lazos de cooperación y amistad con el TC.
En tanto que el magistrado dio las gracias a Zorrilla Ozuna por la acogida que siempre les brindó a los servidores constitucionales y a todo el personal del Inespre, por su trato respetuoso, amigable y solidario durante el tiempo que compartieron las instalaciones.
Señaló que desde sus inicios el TC ha tenido un “peregrinaje urbano” que lo ha llevado a ocupar instalaciones transitorias en la Universidad Iberoamericana (Unibe), la Escuela de Graduados de la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, hasta, finalmente, llegar a este edificio que se convierte en su sede.
“El tribunal depende del Gobierno central para hacer, reparar u otorgar una edificación. Desde hace unos meses nos dijeron que la morada definitiva del tribunal sería aquí, en la edificación del Inespre. Nosotros acatamos y aceptamos la disposición del Gobierno central”, afirmó el juez titular del TC.
Destacó el gran simbolismo que representa la sede actual de la alta corte en la Plaza de la Bandera y del Soldado Desconocido.
“Esta plaza no solo cuenta con la defensa de la integridad del territorio, representada por el Ministerio de Defensa y la expresión de la voluntad libérrima del pueblo a través de la Junta Central Electoral, sino que ahora incorpora formalmente al Tribunal Constitucional, que vela por la supremacía de la Constitución, la defensa del orden constitucional y la protección de los derechos fundamentales”, destacó.
Hasta el momento el TC sólo ocupaba la primera planta del edificio de tres nieveles. También tiene otra sede pequeña, en un edificio de tres niveles para áreas administrativas ubicado en el sector Mirador Norte.
La alta corte carece de una sala de audiencias y las realiza en la Sala Augusta de la Suprema Corte de Justicia.
Ray Guevara había informado en febrero de este año que en el edificio que será su sede definitiva se remodelarán las otras dos plantas y se construirá un edificio al fondo de la propiedad para la sala de audiencia, el salón de eventos, la biblioteca y el centro de estudios constitucionales.