El presidente de la Sala Capitular de la Alcaldía de Boca Chica, Frank Ozuna, se defendió de las acusaciones en su contra sobre las supuestas exigencias de pagos de soborno para la autorización de un permiso de construcción de una obra y dijo que actuó bajo presión porque lo tenían secuestrado en una oficina.
Mediante una llamada telefónica realizada por el programa radial “En la Mira”, conducido por Edith Febles y Amelia Deschamps, el edil aseguró que “fue sorprendido por un gran amigo” que lo secuestró en una oficina y lo acorraló.
“Nosotros fuimos secuestrados, metidos a una oficina que teníamos personas detrás que no sabíamos que estaban ahí, nosotros pudimos haber salidos muertos de ahí. Salieron a buscar al empresario”, dijo a Febles en el audio que fue reproducido este martes en el programa “Enfoque Matinal”, que se transmite por NCDN, canal 37.
Manifestó que llegó bajo engaño a la referida oficina, que supuestamente le habían dicho que el tema a tratar sobre una resolución y para la corrección de un documento se le había cambiado una letra.
Mientras era entrevistado, Ozuna seguía negando que había exigido entre 500 a 600 mil para conceder el permiso de la construcción que realizaría el empresario ferretero Bolívar Taveras, por lo que Febles lo pone a escuchar el audio donde efectivamente indica que la Sala Capitular cobra entre “500 a 600 mil pesos por abajo” para conceder permiso.
A esto Ozuna reacciona diciendo: “es secuestrados que estamos en una oficina, espero que los organismos competentes traten de hacer verdaderamente una minuciosa investigación, que fuimos porque nos llamó un amigo y cuando nos vimos acordonados ahí había que tratar de complacer, que fue lo que pasó ahí en ese audio, no había otra manera de pasar”. Ozuna, dijo además que él podía haber salido de ese lugar muerto y dentro de un saco.