En su escrito de defensa, de 239 páginas, los abogados de Ángel Rondón Rijo además de cuestionar el “hermetismo” con el que el Ministerio Público habría ocultado las pruebas, destaca que su cliente no ha sido señalado por nadie como el autor de los sobornos.
Los juristas señalan que sólo recibieron del Ministerio Público, copias de 72 pruebas a pesar de que en la acusación se presentan más de 1,000, por lo que presumen “la mala fe procesal”.
De igual forma, la defensa del principal imputado defendió su inocencia, alegando que en el acuerdo suscrito entre la empresa Odebrecht y el Estado dominicano, ésta se declara culpable como autor principal del delito de soborno y no identifica a nadie como su cómplice.
“En los artículos 2 y 3 del acuerdo reformulado (páginas 8 y 9), la empresa Odebrecht se responsabiliza como la única autora del delito de soborno, mediante el pago de 92 millones de dólares a favor de funcionarios del Estado. Como consecuencia de ello, se comprometió a restituir dicha suma a favor del Estado y al pago de una suma igual, como compensación”, agrega la instancia.
Además, señalaron que al asumir la empresa su responsabilidad en esos términos, “dichos hechos no le pueden ser atribuidos al mismo tiempo al señor Ángel Rondón Rijo porque dos sujetos por separado, no pueden ser responsables de los mismos hechos a menos que se pueda establecer una concurrencia de coautores o cómplices y éste no es el caso”.
En las contestaciones, Rondón Rijo reitera que no existen suficientes pruebas para sustentar la acusación en su contra, que la acusación carece de fundamento jurídico y que no se ha probado ni su autoría, ni su complicidad.
De igual forma, recuerda que en las declaraciones de los coimputados en los interrogatorios que les realizó el MP, ninguno lo señala como la persona que habría entregado los supuestos sobornos.
Relata que Víctor Díaz Rúa, Conrado Pittaluga Arzeno, Juan Temístocles Montás, Tommy Alberto Galán, Porfirio Andrés Bautista, Juan Roberto Rodríguez y Ruddy González aseguraron conocerlo y tener contacto con él, pero en ninguna ocasión aseguran haber recibido sobornos. Mientras que Julio César Valentín, Ramón Radhamés Segura y Bernardo Antonio Castellanos negaron cualquier tipo de relación con él.
Finalmente, se remiten a los testimonios de los funcionarios de Odebrecht y destacan que ninguno de ellos señala directamente a Rondón Rijo de pagar sobornos.