Tras enfrentar una elevada mortalidad neonatal y la escasez de insumos y equipos, el doctor Cornelio Rodríguez Ramírez, renunció ayer a la dirección del hospital Jaime Mota de Barahona.
Su dimisión fue motivo de júbilo entre algunos sectores del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), que se sintieron afectados por algunas medidas tomadas por el galeno que tendían a sanear este centro de salud regional.
Entre las medidas impopulares ejecutadas por Rodríguez Ramírez se destacan la cancelación de personal administrativo, en su mayoría miembros de la organización oficialista, así como de personas que figuran como empleadas, pero que no desempeñaban función alguna. Durante su gestión también enfrentó la escasez de insumos y hasta de hilo para sutura.
En su carta de renuncia con fecha del 7 del presente mes, dirigida a Chanel Rosa Chupany, director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud (SNS), el ex funcionario señala que a partir del 31 de enero cesa en sus funciones como director del Jaime Mota o a la consideración de sus superiores inmediatos para una fecha previamente establecida.
“Agradecemos el apoyo y la confianza brindada por usted, que nos sirvió para lograr los objetivos trazados al ingresar a la función. Nos reiteramos a su disposición en la función que usted considere”, expresa textualmente uno de los párrafos de la misiva de renuncia, en la que Rodríguez Ramírez, dice que aceptó dirigir el centro público de salud por espacio de un año, en cuyo cargo permaneció más allá del tiempo previsto.
Hace nueve meses este centro de salud del Suroeste fallecieron cinco neonatos que obligaron a la entonces ministra de Salud, Altagracia Guzmán Marcelino, a trasladarse al lugar e intervenir el centro junto al SNS.
La filial del Colegio Médico Dominicano (CMD) en esa localidad celebró ayer una asamblea por alegadas denuncias de maltrato y persecución al personal de salud, así como por las precariedades del centro.