La Semana Mundial de la Lactancia concluyó ayer con una buena noticia: el banco de leche humana Josefina Coén de la Maternidad La Altagracia, reabrió sus puertas tras ser sometido a un proceso de remodelación.
El director, Santiago Martínez informó que el espacio cuenta con sala de espera, cómoda área de extracción, dos congeladores grandes, una nevera para refrigerar y equipos de laboratorio para garantizar que la leche materna reúne los controles de calidad requeridos por un prematuro.
Martínez explicó que al llegar al banco, las madres llenan una ficha de donadora, se le realizan todas las analíticas necesarias y se someten a medidas de bioseguridad previo a la extracción, “la leche se congela y antes de 15 días se realiza un riguroso proceso de pasteurización para eliminar el 100 por ciento de las bacterias patógenas”, aseguró.
El nuevo banco de leche fue instalado próximo a la Unidad de Cuidado Intensivo Neonatal para facilitar el acceso de las madres, “antes hasta se perdían para trasladarse del banco a UCI Neonatal”, destacó Martínez.
El espacio cuenta con cinco enfermeras, dos bioanalistas, un pediatra- perinatólogo y personal administrativo, capacitados por especialistas de Brasil.
Actualmente, el banco tiene inscritas a seis mil donadoras y almacena 30 mil cc de leche, suficiente para alimentar a 300 bebés prematuros durante un mes; el objetivo es captar más leche para poder alimentar, no solo los prematuros de la maternidad sino de todo el país. “El 95% de la donación que recibimos es de madres ingresadas en la maternidad, queremos aumentar la donación.