El procurador general de la República dijo que la condena por acoso sexual impuesta el exfiscal de Samaná, Robert Justo Bobadilla, reafirma el firme compromiso del Ministerio Público de apoyar y acompañar a las mujeres víctimas de cualquier tipo de violencia de género.
Al ponderar la decisión, Jean Rodríguez expresó que, “este caso evidencia que por más que quien ha cometido un delito intente evadir la justicia, el largo brazo de la persecución penal lo alcanza tarde o temprano, lo lleva ante los tribunales y logra que reciba la sanción correspondiente”.
Afirmó además que, para lograr esta condena fue vital la perseverancia de las víctimas, las que dijo, se mantuvieron activas como querellantes. También, valoró el trabajo de la abogada Luz Díaz, que voluntariamente las representó.
Indicó que Bobadilla utilizó todas las estratagemas habidas y por haber para evitar ser sancionado, pero que eso no le sirvió de nada. “Al final, cuando se dio cuenta de que no tenía escapatoria, tuvo que admitir los hechos y acogerse a un juicio penal abreviado.”, dijo el procurador general.
“Cuando llegamos a la Procuraduría General de la República, el caso de ese exfiscal tenía meses estancado en un juicio disciplinario. Me causaba indignación ver como ante ese proceso, que parecía interminable, mujeres que habían sido sus víctimas manifestaban impotencia”, señaló Rodríguez.
Asimismo, explicó que, frente a tan lastimosa situación, junto al equipo del Ministerio Público que estaba a cargo de ese juicio disciplinario, se trazó un plan para agilizarlo, iniciativa esta que hizo posible concluirlo con la destitución de Robert Justo Bobadilla como fiscal titular.
El pasado viernes 5 de octubre Robert Justo Bobadilla fue condenado a un año de prisión suspendida por el Juzgado de la instrucción del Distrito Judicial de Samaná, por acoso sexual a 10 mujeres, ex empleadas del Ministerio Público, usuarias del sistema de justicia y otras de esa demarcación.