Luego de 40 años defendiendo las causas sociales más nobles y su paso por las salas de redacción de periódicos líderes en opinión, Juan Modesto Rodríguez, de 65 años de edad, vive en pobreza y soledad.
Carga cada día con la odisea de poder adquirir los medicamentos y equipos necesarios para enfrentar un cuadro avanzado de osteoporosis, artritis reumatoide degenerativa en la espalda baja.
Modesto Rodríguez, se sustenta de lo que sus 11 hijos le aportan mensualmente, sin embargo, no es suficiente para vivir dignamente. Su vivienda localizada en un callejón en el barrio Paraíso en el municipio de Pedro Brand se encuentra en condiciones de precariedad. Tiene una cocina construida a retazos, una pequeña sala y un cuarto donde tiene una computadora, que por el polvo que hay en cada letra del teclado, denota que no ha sido utilizada por mucho tiempo debido a su condición física degenerativa. El señor Juan mantiene su mente lúcida y recuerda todos los altos y bajos durante sus años de formación en periódicos como elCaribe, Hoy, Listín Diario, La Información, La Nación, Revista Ahora, El Siglo, entre otros.
Admite que escogió la ética como norte y la defensa de los necesitados, sin embargo, hoy en día dice que no abundan quienes asuman estas causas, como las de él, en defensa de los más desposeídos y necesitados en el país.
Durante una visita a su hogar, Modesto, cariñosamente “Papi”, nos abrió las puertas a su historia y trayectoria como reportero, hoy un adulto mayor olvidado, como él se calificó. “Duramos unos años como corresponsal en el periódico El Nacional, tenía unos 20 años cuando comencé. De ahí pasé a trabajar al Listín Diario, posteriormente a El Siglo. No he podido dejar de ser periodista, aunque no estoy activo en las redacciones por la enfermedad, hace seis años sentí los síntomas extraños en el cuerpo y me diagnosticaron osteoporosis, artritis reumatoide degenerativa, y me dijeron que en cinco años no podré caminar y estaré en sillas de rueda. Yo hace casi dos años que para caminar tengo que usar este bastón. Está alojado en la parte baja y tengo muchas dificultades para caminar, yo no estoy gritando ahora porque los hombres tenemos que aguantar, eso es permanente”, dijo Juan Modesto Rodríguez.
Rememora sus años en los gobiernos de Joaquín Balaguer y los grandes periodistas, defensores de la verdad y el bien común, con quienes laboró.
“Antes era a máquina como la Remington, IBM, en cuartillas y luego tarde en los 80’s llegaron las computadoras. Recuerdo en el último gobierno de Balaguer que cubría el Palacio Nacional para el periódico elCaribe, cuando era Germán Emilio Ornes el director, excelente periodista. También estaba con Antonio Emilio, Manuel Quiroz y Tuto Mota”, narró.
Explicó que los insumos médicos son incosteables y pide que las autoridades presten atención a más personas como él.
“Los medicamentos son costosos, escasos y hay mucha demanda y mucha gente en fila esperando. Mucha gente se sorprende cuando me ven. Me gustaría que tomen mi ejemplo para llamar la atención a las autoridades, para que salgan de las oficinas y se vayan a los barrios a ver cómo anda la gente”. Ayer Roberto Marcallé Abreu reveló su situación en El Día.