El expresidente de la Cámara de Diputados y actual vocero del bloque del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Alfredo Pacheco, entra en una etapa reflexiva de su carrera política, luego del “tortuoso año” que vivió, señalado en el caso Odebrecht.
Pacheco agotó un turno en la sesión de ayer para referirse al proceso judicial donde el Ministerio Público le acusaba de haber recibido soborno de la constructora Odebrecht y del cual fue excluido el pasado jueves.
“No es fácil lo que me correspondió vivir, porque estar sometido a un proceso como ese, solo hay que estar en medio de la tempestad, sin embargo, apostamos, aguantamos cada una de las incómodas situaciones, nos quejamos muchas veces, de la tortura que nosotros padecimos durante un año. Yo no tengo palabras para describir el sufrimiento”, expresó un afligido Pacheco a los diputados que se encontraban allí.
El vocero agradeció la solidaridad brindada por los colegas de distintas bancadas, aunque lamentó que todo el mal derramado no pueda recogerse, “me pregunto a veces y ahora, quién puede corregir todas esas situaciones”.
Solidaridad
“Doy gracias a Dios porque salí bien de ese proceso, quiero darle las gracias a cada uno de los colegas diputados que me dieron palmaditas, que me decían ‘siga para adelante’… Gracias a la comisión que tuvo a bien investigar el caso y que entendió que no era necesario que se me quitara la inmunidad parlamentaria. Difícilmente un ser humano habría encontrado tanta solidaridad como la recibida por mí”.
Pacheco refirió que estará asistiendo en lo que resta del año a jornadas de oración, donde reflexionará sobre su futuro político. “Están asistiendo al final de mi carrera política. Me pregunto si después del daño si vale la pena pasar por todo esto, de seguir en la política”, dijo.
