Santo Domingo. Al celebrarse este lunes el Día Mundial del Ambiente, numerosas organizaciones y sacerdotes católicos suscribieron un manifiesto público donde claman por el cuidado de la causa común y en contra de la destrucción del país.
Asimismo, realizaron un juramento y compromiso para defender hasta las últimas consecuencias la casa común y todo lo que en ella habita: la vida, el agua, la biodiversidad, la naturaleza y las posibilidades de desarrollo sostenible e incluyente de nuestras comunidades y de cada ser vivo.
Los firmantes instaron a los seguidores de todos los credos, tendencias ideológicas, iglesias, gremios, organizaciones sociales, ambientalistas, trabajadores, sectores productivos, ecologistas integrales, a toda persona de buena voluntad y al pueblo en general a ponerse de pie para evitar la destrucción del país.
“El agua, el suelo, el aire y la agricultura con soberanía alimentaria valen más que el oro. Le decimos ¡NO! a las explotaciones mineras que sirven a la acumulación frenética de riquezas inmorales para un reducido grupo de capitales depredadores nacionales y transnacionales que empobrecen y contaminan a nuestras comunidades, dejando fuera del bienestar a quienes responsablemente cuidan de estos recursos con sus prácticas”, expresa el documento.
Sostienen que defienden nuestras áreas protegidas y, de manera muy especial, el agua como bien público protegido por la Constitución, el patrimonio hídrico nacional, los bosques nativos, los ríos, la flora, la fauna y los suelos.
Denuncian que el reciente asesinato del agricultor y ambientalista Francisco Ortíz Báez, defensor del rio Tireo, en Constanza, La Vega, es una prueba de la amenaza que representan los depredadores para todas las formas de vida, incluyendo, la vida humana, que no es respetada ni cuidada.
Creen que para detener las amenazas reales de destrucción del país es necesario una gran unidad que lleve a una sola voz de cuidado y custodia de la vida, de los bienes naturales y espirituales, mediante la educación ecológica integral, organización comunitaria, movilización que sume y las denuncias.
El manifiesto está suscrito por la Coordinadora Popular Nacional, Red Socioambiental Nacional, Foro Ciudadano, Asociación Dominicana de Profesores (ADP), Campamento Loma Miranda, Coalición de Organizaciones Populares y Feministas del Cibao, Coalición Enriquilo, Coalición Ecológica-Popular de Bonao, Movimiento Suroeste Unido por el Agua y la Vida, Coalición Ambiental del Noroeste (COANOR), Unión Anti Barcazas de Los Negros de Azua, Articulación Nacional Campesina (ANC), Fundación Voces del Camu (GREMULI), Marcha Verde y la Coalición Socioambiental de la Sierra.
También la Sociedad Ecológica de Restauración, Amanecer Ambiental, Mao, Asamblea Ambiental de Dajabón (ANDA), Unión de Organizaciones Rurales del Noroeste Henry Segarra, Comisión Ambiental por la Esperanza del Río Ozama-CAMBIESO, Instituto de Abogados para la Protección del Medio Ambiente (INSAPROMA), Red Urbano-Popular de la República Dominicana (RUP), Grupo Ecológico Las Lagunas, Villa González, Comité de Defensa de Laguna Saladillo, Brigada Simarrona Sebastián Lemba, Justicia Climática RD, Federación de Juntas de Vecinos de Sabaneta, Santiago Rodríguez (FEJUVESA), Red Ambiental de Santiago Rodríguez (RANSARO), Red Ambiental de Villa Los Almácigos, Colectivo Popular de San Francisco Macorís, Movimiento Popular los Peregrinos de Moca, Red de Encuentro Dominicohaitiano Jacques Viaux, Comité Por la Unidad y los Derechos de la Mujer (CUDEM), Institución Social Colectivo de Salud Popular (COSALUP), Federación Nacional de Transportistas La Nueva Opción (FENATRANO). Movimiento Sociocultural para el Trabajo Humanitario y Ambiental (MOSTHA) y Asociación Campesina Mama Tingo Los Peregrinos del Seibo. Entre otras organizaciones
“Exigimos que todas las empresas y proyectos cumplan estrictamente con la constitución, los convenios internacionales, la ley 64-00 y el conjunto de la legislación ambiental.”, dice