Decenas de unidades vehiculares que una vez estuvieron al servicio de la ciudadanía, como parte del sistema de flotilla de la Oficina Metropolitana de Servicios de Autobuses (OMSA), hoy yacen en varios “cementerios de chatarras”, donde serán desarmadas y posteriormente vendidas como hierro.
Uno de estos depósitos destinados a desmantelar guaguas, adquiridas recientemente mediante subasta pública, se encuentra en el kilómetro 22 de la autopista Duarte, en la Guáyiga, Pedro Brand.
El color verde los identifica. A base de fuego y martillo, un equipo de hombres trabajan en el desguace de aproximadamente 30 autobuses. Mientras en el sector Los Guaricanos, en Santo Domingo Norte, con equipos más sofisticados, la recicladora Durnten, especialista en compra de hierro, acero, aluminio y otros materiales, convierte estas unidades de alta capacidad en pedazos de chatarra con valor en el mercado.
El pasado 21 de marzo, la Dirección General de Bienes Nacionales vendió mil toneladas de chatarras por un monto superior a los seis millones de pesos y según informó a elCaribe, el encargado de Comunicaciones de la OMSA, cerca de 900 toneladas correspondía a autobuses con serios desperfectos de la institución, que ha sido duramente cuestionada por irregularidades durante la pasada gestión. “Habían unidades ahí desde la fundación de la OMSA, con un promedio de 18 a 19 años, que lo que estaban eran estorbando”, sostuvo Melvinson Almánzar.
En el proceso de subasta pública de la Dirección General de Bienes Nacionales (BN) participaron nueve empresas del sector metalero. A la actividad asistieron representantes de las instituciones oficiales de control y los periodistas Consuelo Despradel y Ramón Pérez Reyes con el propósito de asegurar la debida transparencia del proceso.
Guaguas arrumbadas por desperfectos pequeños
Al presentar rendición de cuentas de su gestión el mes pasado en el Palacio Nacional, el nuevo director de la OMSA, Héctor Mojica, indicó que en el Gran Santo Domingo actualmente están funcionando unas 147 unidades y que se trabaja para sacar de los talleres de la entidad más de 100 guaguas, muchas de las cuales dijo están arrumbadas por desperfectos pequeños.