Niños y jóvenes del sector La Zurza, en del Distrito Nacional, convirtieron en artesanía decenas de desechos de sólidos reciclados en las cañadas de la localidad y las riberas del río Isabela.
Plantas de lilas, gomas, papel, cartones, botellones plásticos, cucharas y otros envases desechables son parte de la materia prima transformada en carteras, asientos, centros de mesa, floreros, jarrones y demás obras artesanales, que son exhibidos, hasta el mediodía de este sábado, en la estación Centro De Los Héroes (en la Feria) del Metro De Santo Domingo.
La recolección y capacitación de los niños y jóvenes para la realización de las artesanías recicladas cuenta con la orientación de la Fundación de Saneamiento Ambiental de la Zurza (Fundazurza), como parte de los talleres de educación ambiental y prevención de los efectos climáticos del Campamento de Reciclaje que lleva a cabo la organización desde hace más de una década.
De acuerdo con el encargado del Departamento de Reciclaje de Fundazurza, Juan Fernando Santana, la exposición final de las más de cien artesanías que presentan este año conllevó la ejecución de una gran jornada de recolección de materiales, seguida de diez talleres semanales de formación artesanal en los que participaron 160 niños y jóvenes de entre 11 y 20 años.
Manifestó que, además de difundir la cultura de reciclaje en la población joven, la actividad promueve una fuente de ingreso alternativa para las familias de la zona, debido a que los materiales de la exposición son comercializados.
“Si hay alguien que está interesado en un artículo de ellos, pueden vendérselo o también ellos están en la capacidad de fabricarlo, se lo encargan y se lo entregan a las personas”, dijo.
Programa de reciclaje crea agentes ambientales
De su lado, el director ejecutivo de Fundazurza destacó que el programa de reciclaje ha permitido instruir a miles de niños en la educación ambiental, sobre todo en los conceptos de cambio climático y cómo afectan los residuos sólidos al medio ambiente a través de la contaminación. “La idea es crear agentes ambientales desde los centros educativos, trabajando con los maestros con los estudiantes y trabajando con el personal de apoyo. Estos niños y niñas salen al interior de los sectores, llegan a sus casas y sirven de educadores a la familia”, señaló.