Expresan solidaridad y desagravio con la Magistrada Miriam Germàn Brito.
Santo Domingo, R.D- Con ocasión de celebrarse este 8 de marzo el Dìa Internacional de la Mujer, las mujeres del Movimiento Izquierda Unida se congregaron un Pleno de Delegadas para hacer pública una Proclama en la que pasan balance a las conquistas, retos y desafíos de la mujer en su lucha contra las desigualdades.
Destacan que en el MIU la política de gènero no significa poner a la mujer contra el hombre, sino que se sustenta en el concepto de igualdad con criterio horizontal e implica que la mujer y el hombre tienen los mismos derechos, responsabilidades y oportunidades, sin discriminación.
El MIU promueve y garantiza que mujeres y hombres reciban el mismo trato sin tomar en cuenta las diferencias de clase, credo, etnia, y lo aplicamos con elevado respeto. En las posiciones orgánicas de responsabilidad política, consideramos ese criterio de igualdad y practicamos la equidad en el sentido de su significado ètico, que cada quien recibe lo que le corresponde y lo que merece.
Solidaridad y desagravio con la Magistrada Miriam Germàn
“En este Dìa Internacional de la Mujer, las mujeres del MIU expresamos solidaridad y desagravio a la Magistrada Miriam Germàn Brito, ante la agresión de que fue victima por parte del Procurador General de la Repùblica, Jean Alain Rodrìguez, durante las entrevistas de evaluación para escoger los nuevos jueces del Consejo Nacional de la Magistratura, hecho ocurrido el lunes 4 del presente mes.
El Procurador, en vez de formular preguntas como parte de la entrevista de evaluación del desempeño, lo que hizo fue leer tres comunicaciones “anónimas” en las que se hacen diversas imputaciones a la Magistrada, cuestionando su honestidad y reputación, mediante un tratamiento irrespetuoso, vejatorio y humillante, violatorio de toda norma del Derecho.
Ademàs, ese no era el escenario ni el momento, donde debió primar el debido proceso en cuando al Reglamento para la evaluación de los jueces de la Suprema Corte de Justicia, dictado por el propio Consejo Nacional de la Magistratura.
La actitud del Procurador Rodrìguez pone en evidencia que su intención era descalificar a la Magistrada Germàn, mancillando, de esa forma, su dignidad humana y su derecho a ser evaluada. Una mujer impoluta, de elevada calidad profesional y de gran firmeza en su ejercicio como hacedora de justicia, lo que le ha merecido el reconocimiento del pueblo dominicano.”
Participaciòn política de la mujer en RD
La historia republicana del país recoge importantes aportes de la participación de la mujer como sujeto social en las diferentes etapas, en una sociedad marcada por el patriarcado y el autoritarismo, con una cultura machista. Desde que en 1942 la mujer dominicana ejerciò por primera vez el sufragio, su participación política ha sido creciente y constante, jugando un rol preponderante en la construcción de la democracia desde las diferentes posiciones y cargos políticos, en la administración pública.
Del 25% de cuota para la mujer que asumieron por si los partidos políticos, en la década de los 90, fue incrementado al 33% con la reforma a la Ley Electoral de 1997, quedando establecido en la Ley 12-2000. En este orden, la Ley 33-18 de Partidos, Organizaciones y Movimientos Polìticos, marco legal para garantizar la democracia interna de los partidos y fortalecer el sistema de partidos políticos, es un gran logro como ley posible, aunque no perfecta. El tema de la cuota de gènero y de jóvenes seguirá sobre la mesa, entre otros, que según opiniones de analistas políticos, también presentan inconsistencias.
La mujer dominicana supera con màs del 50% al hombre en el padròn electoral, por lo que su voto es decisivo para ganar unas elecciones. Por ello, constituye un retroceso la cuota de gènero 40/60% mujeres y hombres, a nivel nacional e igualmente la de 10% para jóvenes de hasta 35 años.
Llamamos la atención en este sentido, porque el paso de avance que se ha logrado con dicha Ley, por solo tenerla, podría reducirse a debates, diferencias o conflictos en su “interpretación” real o acomodaticia, en algunos casos. Las mujeres de las organizaciones políticas durante todo el proceso de esta ley, alzaron su voz con el tema de la cuota y demanda de la paridad, nivel que varios países de la región han alcanzado.