La mujer acusada de calcinar a su hija de 22 años el pasado martes en Santo Domingo Este aseguró ayer que no cometió el hecho, como afirman los fiscales.
Su versión no fue suficiente. A Kenia Martínez Lara, imputada de incurrir en los delitos de asesinato, actos de barbarie, incendio y sustracción de menor de edad en perjuicio de su nieta, un juez le impuso un año de prisión preventiva.
El magistrado Bernardo Coplin, de la Oficina Judicial de Servicios de Atención Permanente de Santo Domingo, dispuso que Martínez Lara cumpla la medida de coerción en el Centro de Corrección y Rehabilitación Najayo-Mujeres.
“No fui yo”, dijo la mujer después de que se le impusiera la prisión, al ser preguntada por periodistas si en verdad cometió el hecho.
Su abogado, Engel Amparo, quien es un defensor público, dijo que van a esperar que le notifiquen la resolución para analizar la decisión del juez Coplin.
De acuerdo a los fiscales, la imputada se presentó a la casa de su hija Estephany García Martínez, quien tenía 18 días que había dado a luz a una niña.
Indicaron que mientras sostenían una discusión, Martínez Lara utilizando una sustancia, inmovilizó a la hoy occisa, dejándola tendida en la cama y que a eso de las 4:00 de la madrugada incendió el cuerpo de su hija, ocasionando un incendio que le produjo la muerte.
Supuestamente, después del hecho, la imputada sustrajo a su nieta, recién nacida.