El Ministerio Público solicitó ayer al Pleno de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) que conoce el caso Odebrehct “no dejarse engañar” por los alegatos que hicieron los abogados de los seis imputados cuando presentaron sus incidentes y excepciones.
Los miembros del órgano acusador indicaron que los argumentos expuestos por las barras de las defensas son contrarios a lo que establece la norma.
Durante el inicio de la refutación a las solicitudes hechas por cada una de los imputados, dentro de la fase de preparación del debate, el procurador fiscal Milcíades Guzmán indicó que las mismas no tienen posibilidad de ser acogidas por los jueces del Pleno.
“No caigamos en el caos, no nos dejemos engañar” y “es una trampa jurídica la que los abogados están evocando aquí”, fueron algunas de las pablaras usadas por Guzmán durante su discurso.
Sobre la solicitud de anular el proceso por la jurisdicción privilegiada, Guzmán indicó que la misma es una desfase interpretativo a la norma y que no tiene sentido que, por quitarse la calificación jurídica de asociación de malhechores, que los imputados indican que esto entonces no permite que el senador Tommy Galán los arrastre hacia esta jurisdicción, el caso tenga que declinarse hacia un tribunal ordinario.
Asimismo, aseguró que la petición de excluir varias de las pruebas que tiene el Ministerio Público, entre ellas las delaciones premiadas, no forma parte de los incidentes que se tienen que plantear en esta fase, y que además los jueces para poder excluirlas tendría que conocerlas, lo que afectaría el principio de oralidad.
La audiencia continúa este miércoles en la tarde, donde se tiene previsto que los fiscales se concluyan con sus refutaciones.