A seis años del inicio de la implementación de la estrategia de jornada escolar extendida que elevó de cuatro a ocho, las horas lectivas en el sistema escolar público, aún persisten debilidades y vacíos, como es la falta de talleristas en la mayoría de centros donde se implementa.
La presidenta de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), Xiomara Guante ha planteado que la política pública que se ha convertido en uno de los sellos característicos de este Gobierno y que beneficia al 75% del estudiantado, tiene más de social que de académico, ya que se inclina mayormente al suministro de alimentación escolar.
Guante ha abogado desde distintos escenarios que se contraten los talleristas para la enseñanza de artes, deportes y otras disciplinas que contribuyan a la formación integral de los estudiantes y los disuada de incurrir en actos violentos como los que con frecuencia suceden en las aulas.
Según la dirigente sindical los profesores necesitan tiempo en horas de la tarde para repensar su práctica docente, planificar sus clases e incluso, tener un espacio para almorzar con tranquilidad.
Entidades como la Asociación de Profesores de Inglés de la República Dominicana (RD-TESOL), han planteado que la jornada extendida sea el espacio ideal para que los estudiantes del sector público salgan siendo bilingües, mediante el empleo efectivo de parte del tiempo extra en la enseñanza del inglés.
Sin embargo, el director de Currículo del Ministerio de Educación, José Remigio García ha defendido la eficacia de la tanda extendida, alegando que optimiza aprendizajes de calidad, conjuntamente con el adecuado uso de los espacios y los medios, que muestra resultados tangibles.
Asegura que los resultados académicos de los estudiantes de tanda extendida son mejores que los de la tanda regular, lo cual se vio reflejado en un puntaje ligeramente superior en la evaluación diagnostica de tercer grado de primaria y en las pruebas nacionales.
Según García, la implementación del nuevo currículo por competencias y la política de tanda extendida es un proceso complejo cuyos resultados se van verificando a mediano y largo plazos.
Apuntó que, con la ampliación del horario escolar a ocho horas diarias, se garantizan seis horas de docencia en 8 períodos de 45 minutos cada uno, y dos horas dedicadas al servicio de los alimentos, recreos y acto de la bandera: “Razón por la cual no hay tiempo vacío en la escuela de jornada extendida”. Lo cierto es que la aspiración del ex ministro Andrés Navarro de universalizar la tanda extendida en el 2018 no fue posible y sigued fuera un 35% del estudiantado.