“Mi hermana no fue una mujer perfecta, pero le faltó muy poco”. Con esta frase describió José Luis Arias a su hermana Karen Daslibet Arias, la joven de 29 años que fue encontrada muerta el lunes junto al sargento de la Policía, Franklin Antonio Guzmán, de 31, en lo que se ha determinado se trató de un homicidio-suicidio.
Los jóvenes muertos, que fueron encontrados dentro de un vehículo en la calle Rosa Duarte, del sector de Gascue, en el Distrito Nacional, fueron pareja y no hermanastros, como se dio a conocer inicialmente. Franklin Antonio Guzmán habría matado a la joven y posteriormente se quitó la vida.
Afligidos y consternados por el hecho, familiares de Karen Daslibet Arias, conversaron ayer con la prensa mientras se encontraban en la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif) a la espera de que les entregaran el cuerpo de su pariente.
Fueron estos, quienes aclararon que el homicida-suicida no era familiar de la joven, sino que en el pasado habían tenido una relación amorosa.
“Sí, ellos (los muertos) se habían dejado. Ella se había casado, inclusive, con su pareja el 4 de este mes. Tal vez ese fue el detonante, tal vez eso fue lo que le molestó (al homicida-suicida)”, comentó José Luis Arias, un hermano de la joven que deja en la orfandad a una niña de 9 años.
José Luis Arias afirmó que su hermana, -a quien definió como una mujer trabajadora y luchadora- tuvo una relación de corta duración y “de pocos meses” con Franklin Antonio Guzmán, con quien trató pocas veces. “Mi hermana era una mujer trabajadora, luchadora, que no se sentaba. Siempre con altas y bajas, como todo el mundo, pero no se descuidaba ni con mi mamá, ni con su hija. Yo le puedo decir que mi hermana no fue una mujer perfecta, pero le faltó muy poco”, contó entre lágrimas ante el dolor de la inesperada pérdida.