El huracán Fiona dejó a varias familias desplazadas en San Pedro de Macorís y apagó por completo La Romana
Los fuertes vientos del huracán Fiona derribaron el zinc de la casa de Santa Sierra en San Pedro de Macorís, quien tuvo que salir corriendo en horas de la madrugada a buscar un refugio en compañía de su esposo que está en silla de ruedas, porque quedaron desprotegidos en medio del fenómeno atmosférico.
La señora, que reside en el municipio Ramón Santana de la citada provincia, recibió auxilio de la Iglesia Bautista Evangélica, lugar desde donde espera que bajen los efectos del evento natural para reconstruir una vez más su hogar.
Al igual que Sierra, cientos de personas de la demarcación ubicada en el este también se vieron obligados a dejar sus ajuares y otras pertenencias a la hora de buscar albergues por los daños que produjo Fiona.
Según Jorge Familia, quien es el asistente de la gobernadora Aracelis Villanueva, alrededor de 200 individuos de zonas vulnerables tuvieron que ser desplazados a algunos de los 71 refugios que fueron habilitados en la comunidad.
En conversación con este medio, dijo que tienen la capacidad para instalar más si la situación lo amerita. Sin embargo, manifestó que los centros educativos serían la última opción para acoger a los damnificados por la cercanía del regreso a clases, que hasta ahora sigue estando pautado para mañana.
Agregó que mientras estén en los albergues, los refugiados recibirán de parte de la Gobernación y el Plan de Asistencia Social de la Presidencia (PASP) alimentos crudos y cocinados.
Ayer en horas de la mañana las autoridades aún no tenían reportes de inundaciones, pero al recorrer varias de las carreteras de la provincia era evidente la cantidad de árboles que fueron derribados por la brisa del huracán.
Informó que todas las instituciones del Gobierno, así como los cuerpos castrenses trabajan de manera conjunta para mitigar las consecuencias de Fiona.
No hay luz en La Romana
Los vientos huracanados de Fiona que entró al país como categoría uno y salió con mucha más fuerza, derribaron varios postes de luz en La Romana que dejaron a toda la provincia sin energía eléctrica.
Solo en el municipio de Villa Hermosa quedaron cerca de 200 mil personas sin luz; así lo informó el alcalde Favio Antonio Noel, quien indicó que todos los daños causados por el huracán fueron materiales.
Asimismo, la gobernadora Jacqueline Fernández Brito, destacó que el tendido eléctrico fue lo más afectado en la zona, a pesar de que también cayeron decenas de árboles que impidieron a las personas desplazarse por algunos puntos.
“Tenemos un municipio incomunicado, Guaymate, pero ya se está trabajando con un equipo pesado para levantar el tendido eléctrico y quitar los árboles que están cayendo”, expresó.
Tal como sucedió en San Pedro de Macorís, la funcionaria añadió que Fiona dejó varias casas sin zinc, lo que llevó a muchas personas a salir de sus hogares.
No obstante, declaró que la mayoría se quedó en residencia de familiares o amigos, por lo que al mediodía los albergues estaban prácticamente vacíos.
Las calles desocupadas y la gente en sus casas
Tanto en San Pedro de Macorís como en La Romana, el paso del huracán dejó las calles desoladas, y es que los comercios estaban cerrados y pocas personas acudieron a sus puestos de trabajo luego de que el presidente Luis Abinader suspendiera mediante decreto las labores públicas y privadas.
Solo algunos curiosos salieron de sus casas para ver los estragos de Fiona recorrieron las playas y las avenidas a pesar de los fuertes vientos que dejaba el fenómeno atmosférico mientras se desplazaba por parte del territorio nacional.
A raíz de la disposición del jefe de Gobierno y por los efectos del huracán, los peajes permitieron el tránsito vehicular hacía el interior del país de manera gratuita.
En ambas demarcaciones estuvieron operando los centros médicos, las farmacias, las estaciones de combustibles y algunos supermercados.