La Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) consideró que uno de los principales desafíos que enfrenta el Estado y la sociedad dominicana es la debilidad del Sistema de Justicia, donde existen “zonas de penumbras” que alimentan la desconfianza ciudadana.
El vicepresidente ejecutivo de Finjus, Servio Tulio Castaños Guzmán, lamentó que al final del 2017 en el sistema de justicia dominicano todavía persistan debilidades identificadas en diagnóstico y estudios recientes, que evidencian que no se han alcanzado “los niveles de independencia, eficiencia, transparencia y previsibilidad necesarios para garantizar la seguridad jurídica imprescindible para el desarrollo económico y social nacional”.
Al presentar el balance institucional del actual año, Castaños Guzmán puntualizó en ese sentido que la situación del campo penal “contribuye al resquebrajamiento de su legitimidad a causa de los bajos niveles de credibilidad y confianza ciudadana en sus órganos”.
Castaños Guzmán consideró que la inobservancia por parte de los poderes Ejecutivo y Legislativo de aplicar la ley de Autonomía Presupuestaría del Poder Judicial y el Ministerio Público se suman a este panorama, que “mantiene a las principales instituciones del sistema de justicia en una situación de precariedad para el desarrollo de políticas públicas que aseguren la política criminal del Estado y las medidas que facilitan el acceso, eficiencia y gratuidad de la justicia”.
Asimismo, Finjus ponderó el esfuerzo estatal a favor de la seguridad ciudadana, calificando como muy positivo el conjunto de medidas que se avanzan en la implementación gradual del Plan Estratégico de la Policía Nacional, así como la adecuación de sus estructuras internas a lo establecido en su Ley Orgánica. Entre otros aspectos, aplaudió las mejoras en las condiciones salariales de todos los agentes policiales.