Acción. En un operativo realizado el pasado sábado, fueron desalojadas más de 300 familias que habitaban en unos terrenos propiedad del Estado dominicano y asignados a la Fuerza Aérea de República Dominicana (FARD), en el perímetro de amortiguamiento de la base aérea de San Isidro.
Sin poder sacar sus ajuares y sin mediar palabras ese día, la FARD acudió al sector La Mina, en San Isidro, Santo Domingo Este, con miembros de la Policía Nacional, en su rol de fuerza pública y representantes del Ministerio Público, además de personal del Consejo Nacional para la Niñez (Conani), la Dirección General de Migración (DGM), el Servicio Nacional para la Protección Ambiental (Senpa), el Jardín Botánico y el Ayuntamiento de Santo Domingo Este, y derrumbó unas 344 casas que habían sido levantadas en el lugar.
Mediante una nota de prensa, la FARD explicó que los desalojados fueron notificados el pasado 29 de marzo del año en curso, y se les dio una semana más del plazo de los 15 días que establece la ley para abandonar voluntariamente la propiedad privada invadida. “Pedimos al presidente de la República que no permita este atropello. Ya que hay familias que no saben qué hacer. No es fácil quedarse en las calles, cuando hay hijos pequeños. Aquí se está maltratando a la gente, se les está golpeando. Esto no es posible que esté ocurriendo en un gobierno que se ha dicho que es del cambio. Por favor que no nos maltraten, somos seres humanos. Necesitamos donde vivir”, fueron las palabras de uno de los desalojados, bajo reserva de su nombre.
Al explicar los motivos de la acción, la institución militar dijo que la recuperación de los terrenos tiene como objetivo restaurar la función original asignada a esos 787,058 metros cuadrados ubicados junto a la verja perimetral noroeste de la Base Aérea de San Isidro. Indicó, además, que esa es una zona de “importante valor estratégico”.
