Durante los últimos 13 años, por lo menos 10 sacerdotes o diáconos dominicanos han estado inmersos en delitos vinculados a violencia sexual y homicidios. Algunos de ellos están tras las rejas.
En el año 2005, el Hogar Infantil Católico Francisco Javier, de San Rafael del Yuma en Higüey, fue sacudido con el caso de la violación de ocho niñas y un niño. En este hecho están implicados los sacerdotes Cirilo Antonio Núñez y Ramón Antonio Betances y otros tres empleados del albergue, a quienes las niñas, en sus declaraciones frente a los jueces, acusaron de haberlas violado y obligarlas incluso a cometer asesinatos como parte de ritos satánicos.
De los seis sindicados en el caso, cuatro murieron en diferentes hechos y los dos principales sospechosos (Núñez y Betances), siguen en libertad.
También en el 2005 el diácono Meregildo Díaz, fue condenado a 20 años de prisión tras ser declarado culpable del asesinato de la pareja Yaniris Ruiz Sánchez y Joel Díaz Sarmiento. El diácono mantuvo una relación sentimental con Joel, pero luego éste decidió mudarse con su novia y tras intentar extorsionar al clérigo, fueron asesinados y sus cuerpos quemados en dos tanques de basura.
Red de pornografía infantil
Durante 2009, el sacerdote Domingo Espinal, fue condenado a 15 años de cárcel por violar a un niño de 12 años en el año 2003. El tribunal le ordenó además el pago de una multa de RD$100 mil.
Cuatro años después, en el 2013, se registraron dos casos más de sacerdotes vinculados a delitos de agresión sexual en República Dominicana.
También en el 2013, el sacerdote Juan Manuel Mota de Jesús (padre Johnny), fue degradado por un Tribunal Eclesiástico del Vaticano, pero no ha sido sometido a la justicia, tras ser acusado de agresión sexual contra 11 menores de edad en la parroquia La Cátedra de San Pedro.
En el año 2015 un tribunal de Varsovia condenó al padre Wojciech Gil, de Juncalito, a siete años de prisión y una indemnización de 40 mil euros, por la violación de siete niños y por integrar una red de pornografía infantil. Le incautaron 87 mil archivos de fotos y vídeos en la computadora.
Por último, destacan los casos de los sacerdotes Elvin Taveras Durán y Miguel Florenzán Ulloa, ocurridos el año pasado. El primero de ellos recibió un año de prisión preventiva, luego de ser imputado por el asesinato del joven Fernelis Carrión Saviñón; mientras que Florenzán Ulloa, fue enviado a prisión preventiva por tres meses, por su vinculación en la violación de varios menores.
El caso más sonado fue el de Józef Wesołowski
El caso más sonado fue el investigado por la periodista Nuria Piera, que involucró al exembajador del Vaticano en el país, Józef Wesołowski, quien se dedicaba a pagarle a menores para realizar actos sexuales en el Monumento a Fray Antón de Montesinos de la Zona Colonial. Fue acusado de pederasta. Murió en el Vaticano en el 2015. No actuaba solo, le acompañaba en sus actuaciones el diácono Francisco Javier Occi Reyes, condenado a prisión.