Santo Domingo. La fiscal del Distrito Nacional, fue emplazada por el empresario Carlos Gómez para que dé le curso a la querella interpuesta en contra del ex ministro de Obras Públicas, Freddy Pérez y varios socios, acusados de abuso de confianza y asociación de malhechores en la venta del edificio del Ministerio de Industria y Comercio en la avenida 27 de febrero, de esta capital.
El emplazamiento a la fiscal Rosalba Ramos, fue hecho por el empresario, a través de su abogado Julio Santamaría, quien alega que el fiscal Franklin Céspedes, apoderado del caso, se ha negado a avanzar en la pesquisa.
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“Reclamamos a la Fiscal que dé curso al expediente depositado hace carios meses ya que el fiscal apoderado del caso se ha negado a avanzar en la diligencia”, acotó el jurista Santamaría.
El empresario Gómez alega que sus socios en el desarrollo del inmueble se apropiaron de lo que correspondía valiéndose de maniobras que constituyen delitos penales.
El abogado Santamaría denunció que hasta ahora la Fiscalía se ha rehusado levantar el velo corporativo que permita rastrear el destino de más de 670 millones de pesos que los socios de Gómez distrajeron y luego alegaron que la operación no dejó ganancias.
Manifestó que ese alegato no tiene asidero, ya que los socios de Carlos Gómez recibieron un cheque de administración del Banco de Reservas por 671 millones de pesos luego de la entidad descontar el financiamiento del edificio.
Explicó que ese dinero Freddy Pérez y sus socios Publio Silfa y Ramón Andújar emitieron varios cheques por decenas de millones de pesos a nombre de familiares, mientras que el señor Gómez no recibió su parte del negocio.
Expresó que mediante el levantamiento del velo corporativo, la Fiscalía del Distrito Nacional podrá seguir el rastro de ese dinero y de otros valores parte de la sociedad, ya que el edificio fue vendido a Industria y Comercio, a través del Banco de Reservas, por 33 millones de dólares, equivalente a más de mil 400 millones a la tasa de cambio del momento.
Indicó que Gómez aportó más de un millón de dólares para salvar el inmueble que estaba afectado por una hipoteca con otra entidad bancaria, lo que viabilizó el financiamiento con el Reservas.
Señaló se convirtió en socio de Freddy Pérez en proporción 50/50, sociedad que luego avanzó a la construcción del edificio, como lo demuestra la documentación depositada en la querella con constitución en actor civil.
Santamaría reveló que cuando Gómez reclamó, tras la venta del edificio, Freddy Pérez alegó que el negocio no produjo ganancias porque tuvo que darle tres millones de dólares a un funcionario de Industria y Comercio para llevar a cabo la operación.
“No sabemos cuál es la razón por la cual la Fiscalía no accede a levantar el velo corporativo, dando a entender que tiene compromisos que no son precisamente la lucha contra la corrupción”, apuntó el abogado Santamaría.
Indicó que si se alega que un funcionario recibió una comisión, eso entra en el terreno de corrupción administrativa que el Procurador general de la República está tan empeñado en combatir, por lo que llamó al magistrado Jean Rodríguez a interesarse por el caso. Lamentó que siendo Gómez un empresario exitoso interesado en desarrollar proyectos se encuentre con otras dificultades que eventualmente pudiera afectar el entusiasmo de seguir haciendo negocios en la República Dominicana.
Advirtió que Gómez llevará el caso hasta las últimas consecuencias pues su ejercicio empresarial ha sido arduo y transparente y sus inversiones en los Estados Unidos y en el país han sido producto de su esfuerzo de muchos años.