Al conmemorar el 159 aniversario de la gesta restauradora, el Instituto Duartiano reiteró ayer la solicitud al Poder Ejecutivo y al Congreso Nacional de dejar sin efecto los decretos de los años 1975 y 1978 con el que introdujeron las cenizas de Pedro Santana al Panteón Nacional.
El presidente de la entidad, Wilson Gómez, señaló que los méritos de Santana durante las acciones de guerra quedaron absolutamente borrados por traicionar al país y asesinar a patriotas.
Al depositar una ofrenda floral en el monumento junto a otros miembros de la institución, destacó que las bóvedas del mausoleo deben estar reservadas a los buenos dominicanos, por lo que entienden que es una afrenta que los restos de quien fuera tres veces presidente de la República estén junto a los de otros héroes nacionales.
Otros de los que favorecen la salida de Pedro Santana es el dirigente del partido Fuerza Nacional Progresista (FNP), Pelegrín Castillo, quien manifestó que lo mejor era levantar un monumento a su nombre para reconocer sus aportes militares.
Sin embargo, declaró que Santana debe permanecer en el panteón hasta que se resuelva el tema haitiano en la República Dominicana.
“Estamos en el bicentenario de la primera ocupación que fue militar, la actual es de millones y sigue creciendo ante la vacilación y la inconsistencia de la clase dirigente del país (…), hay sectores empresariales, religiosos y sindicales que no terminan de fijar una solución nacional”, expresó.
Agregó que en los últimos 20 años la crisis haitiana se ha ido descargando en el territorio.
Falta mucho por lograr
Pese a la conmemoración de los 159 años de la guerra de la Restauración, el presidente del Instituto Duartiano, Wilson Gómez, afirmó que el país todavía está en lucha de conseguir lo que Duarte quiso, un estado feliz y con independencia.
“La felicidad se consigue cuando se alcanza el estado de derecho, cuando las leyes se cumplen, cuando se obedecen las decisiones emanadas de la autoridad legítima, y todavía hoy luchamos porque disposiciones importantes incluyendo preceptos institucionales se cumplan”, resaltó.
Lamentó que todavía no se ejecute la articulación de la ley que dispone resolver lo de la titularidad de la tierra en la frontera, que la normativa de migración no se aplique en los términos que debe administrarse, y que no se cumpla con el porcentaje de dominicanos que establece el Código Laboral para trabajar en proyectos y empresas.