Dos obispos de la Iglesia católica se preparan para en los primeros tres meses de este año presentar al papa Francisco sus respectivas cartas de renuncia.Monseñor José Dolores Grullón Estrella, obispo de la diócesis de San Juan de la Maguana, cumple 75 años el día 15 de este mes de enero, por lo que de acuerdo con el Código de Derecho Canónico debe renunciar a sus funciones.
En igual situación se encuentra monseñor Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, obispo de la diócesis de La Altagracia, quien cumple los 75 años el 12 de marzo.
Según explicó el padre Kennedy Rodríguez, encargado de comunicaciones del Arzobispado de Santo Domingo, es posible que Grullón Estrella y Peña Rodríguez tengan sus cartas redactadas, pero desconoce si las han presentado.
Se estila que los obispos presenten sus cartas de renuncia el mismo día en que cumplen los 75 años de edad, pero es potestad del papa Francisco prolongar sus funciones por otros dos años, hasta que designe a los nuevos prelados.
También está pendiente que el papa Francisco designe a un nuevo obispo en la diócesis de San Francisco de Macorís, ya que monseñor Fausto R. Mejía cumplió 76 años el 15 de diciembre pasado, fecha en que presentó su renuncia.
Santo Domingo y SPM
El papa Francisco también tiene pendiente designar los nuevos obispos auxiliares de la arquidiócesis de Santo Domingo, ya que monseñor Víctor Masalles Pere fue escogido como obispo de la diócesis de Baní, y el otro obispo auxiliar, monseñor Amancio Escapa Aparicio, nació el 30 de marzo de 1938 y está retirado.
El papa Francisco debe nombrar uno o los que se considere necesario este año, pero monseñor Ozoria puede recomendar que mientras tanto se asigne como auxiliar de la arquidiócesis a un obispo emérito.
También está pendiente la designación del obispo de San Pedro de Macorís, diócesis que estaba a cargo de monseñor Francisco Ozoria Acosta, actualmente arzobispo de la arquidiócesis de Santo Domingo.
Monseñor Rafael Leónidas Felipe Núñez, obispo emérito de Barahona, está a cargo de la diócesis de San Pedro de Macorís y funge como administrador episcopal, en lo que se designa a un obispo titular.