El exministro de Hacienda, Donald Guerrero, fue interrogado ayer por cuarta ocasión en la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) y fue citado a volver el próximo lunes 22 de febrero.
“Debo volver a lo mismo de siempre el próximo lunes”, se limitó a decir el exfuncionario, a quien el Ministerio Público le hace imputaciones por varios delitos, entre ellos, asociación de malhechores, desfalco y estafa contra el Estado, falsedad de documentos públicos, lavado de activos provenientes de delitos de corrupción administrativa y sobre supuestas irregularidades en su declaración jurada de patrimonio, la cual supera los mil millones de pesos.
Dos de sus abogados le volvieron a acompañar en el interrogatorio de ayer, y ambos cargaban consigo dos maletas en las que se presume había documentación relativa al caso.
Guerrero fue interrogado por Wilson Camacho, titular de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca), y Yeni Berenice Reynoso, directora general de Persecución del Ministerio Público. En una ocasión, también fue cuestionado por la procuradora general Miriam Germán Brito.
El Ministerio Público actuó en el caso luego de una denuncia pública del titular de la Dirección General de Presupuesto, José Rijo Presbot, “quien alertó sobre pagos irregulares a contratistas ocurridos en la última etapa de las gestiones de Danilo Medina (2012-2020), de alrededor de 21,000 millones de pesos, pero las indagatorias se extienden a otros hechos”. De acuerdo a declaraciones de Guerrero, cuando acudió a uno de los interrogatorios el pasado 5 de febrero, los cuestionamientos giraron en torno a su declaración jurada de bienes. Según la declaración jurada presentada, el exministro tiene bienes e inversiones por 752 millones de pesos.