Una garantía económica de un millón de pesos, un grillete electrónico e impedimento de salida del país se le impuso ayer a una de los acusados de estafar a los miembros de la denominada familia Rosario.
La Oficina de Atención Permanente del Distrito dictó la medida de coerción en contra de Miguelina Gómez Santana, sometida a la justicia por presuntamente estafar a más de 280 personas junto al abogado Johnny Portorreal, Hilario Amparo y Miguel de Óleo Montero, quienes están prófugos.
El Ministerio Público había pedido al tribunal que a la imputada, detenida desde la semana pasada, se le impusiera prisión preventiva.
De acuerdo a las investigaciones, los imputados cobraban altas sumas de dinero a las víctimas, para realizar supuestas diligencias del cobro de la falsa herencia millonaria ascendente a 13 mil millones de euros. Presuntamente la herencia la dejaron Celedonio Rosario y María del Rosario (fallecidos), en España y Suiza.